Una de las bebidas alcohólicas más populares del mundo es la cerveza. Y ya sea que la bebas o no, existen algunos datos interesantes sobre la misma, especialmente porque su sabor y color dependen de muchos factores físicos cuando es creada, embotellada y servida. ¿Te gustaría enterarte de algunos? Sigue leyendo.
Al servir una cerveza, se debe de hacer en un ángulo de 45 grados, ya que esto crea las burbujas suficientes para darle una textura espumosa, pero no demasiadas.
El vaso en el que sirves la cerveza afecta su sabor, pues determina cuánto se calienta al tomarlo con tus manos. La temperatura de la cerveza modifica su sabor, y por ello es mejor usar tarros con asas para no tomarlo con las manos.
La luz que rebota dentro de un tarro es lo que determina el color en que percibimos la cerveza.
¿Sabías que la espuma de la cerveza desaparece de manera exponencial?
Los lápices labiales y los dedos pueden disminuir drásticamente la creación de espuma.
El oxígeno es el peor enemigo de la cerveza, por lo que se usa CO2 para evitar que la misma se oxide rápidamente. Algo similar ocurre cuando se deja abierta una botella de vino y se produce vinagre.
Por cada vaso de cerveza, hay aproximadamente dos vasos de CO2 disueltos en ella.
Los pequeños bordes redondos en la base de la botella de la cerveza existen porque evitan que las botellas se resbalen en la fábrica. Crean suficiente fricción con la banda transportadora para que las botellas no se caigan.
Golpear el cuello de una botella de cerveza con la base de otra botella causará una reacción que producirá muchísima espuma.
Los científicos usan la misma tecnología que monitorea volcanes, para monitorear las burbujas que se producen en una cerveza.
La variación de unos grados centígrados al crear una cerveza, causa cambios drásticos en su color y sabor finales.
La cerveza se calienta más rápidamente en ambientes húmedos. Por ejemplo, en un día muy húmedo una cerveza puede pasar de 0ºC a 9ºC en cinco minutos.
El congelar una cerveza le dará un sabor mucho más fuerte.
¿Sabías que entre más densa es la cerveza, menos alcohol contiene? Las cervecerías usan un instrumento llamado hidrómetro, que flota en la cerveza para calcular la densidad de la misma y calcula el porcentaje de alcohol que contiene.
Existe una cerveza en Delaware, Estados Unidos, que se crea con polvo de la Luna.
Durante la Guerra Fría, los científicos arrojaron bombas nucleares sobre cerveza y refresco para estudiar su comportamiento en caso de un desastre. La cerveza se podía beber sin problema después, pues resultaba intacta.
¿Qué te parecen estos datos? ¿Añadirías otro?
Karla Motte
Fuente: Sin Embargo
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