- Sentirse inseguro a la hora de elegir un vino cuando viajas es muy común
- Atreverse a probar vinos nuevos en el extranjero abre tu mente y amplía tus horizontes gastronómicos
Cuando viajas, ¿te has sentido alguna vez un tanto inseguro cuando en un restaurante te ofrecen la carta de vinos? Es normal, no te preocupes. No hace falta ser un experto para poder elegir un buen vino, pero tampoco vamos a decidir que vino tomar, como hacen muchos, apostando por el segundo más barato de la lista, lo más probable es que nos equivoquemos.Aquí te dejo 8 consejos que te ayudarán a decidir más fácilmente.
1.Piensa que, la carta de vino puede ser una buena forma de entablar conversación entre amigos o de romper el hielo si se trata de negocios. Así que, utilízala para tratar de saber ver qué tipo de vino les gustaría beber a los demás.
2.Sin Prisas. Si el camarero llega y pregunta «¿Qué vino le gustaría?» y todavía no lo tienes claro, puedes sugerir su ayuda con un «tiene una selección muy interesante, ¿me podría dar un par de minutos?»
3.Por descarte, podemos conseguir reducir la lista rápidamente. Primero, ¿blanco o tinto?; ya te has quedado con la mitad de la lista. ¿Qué vas a comer? ¿Carne o pescado?, ¿Un plato clásico o moderno?, ¿es una comida o una cena? Piensa que un blanco ligero y aromático puede ser una buena elección para una comida, quizás mejor que un tinto con mucho cuerpo. Ya hemos conseguido reducirbastante la lista original.
4.Si eres lector habitual de mi columna, te resultarán familiares muchos de los varietales internacionales que encontrarás en las cartas de vino de otros países. En una ciudad cosmopolita como Londres, las cartas de vinos son de lo más variado con referencias de todo el mundo. Lo más sencillo, es identificar aquellos varietales que conoces como por ejemplo, Cabernet Sauvignon, Malbec, Riesling o Sauvignon Blanc.
5.Una parte importante de comer fuera cuando viajas a otro país, es el tener la oportunidad poder experimentar. Por lo general, es buena idea probar un vino de la zona. Si por ejemplo estás en Viena, Austria, tienes que pedir un Grüner Veltliner.
6.¿Cuánto te vas a gastar? Eso depende de ti y también de cuántos sois a la mesa, de la ocasión de la que se trata... Pero llegados a este punto, la lista es mucho más manejable.
7.Después de haber descartado una gran número de vinos, queda una pequeña selección, así que, cuando se acerque el camarero en vez de la típica pregunta tipo, «¿cuál de estos vinos me recomendaría?» Es mejor preguntar, «¿qué me puede decir de este vino?». ¿Por qué? porque así tendremos más información para tomar la decisión final.
8.También, si hay un vino que te parece interesante en Apps como 'Vivino' puedes ver las opiniones de otros que ya lo han probado.
Sea donde sea, en un buen restaurante, la carta de vinos no debería suponer un problema ni hacernos sentir como si pisáramos un campo de minas. Si bien es cierto que en países como Grecia o Alemania las cartas pueden resultar un tanto incomprensibles, aún en ese caso, con estos sencillos consejos deberías poder ser capaz de elegir un vino adecuado. Y recuerda, atrévete a probar vinos nuevos, abre tu mente, amplía tus horizontes.
Mark ONeill
Fundador de TheWinePlace.es y experto en vinos internacionales.
Fuente: El Mundo
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