“Cada 60 minutos, alrededor del planeta, se comercializan en promedio más de 28.000 botellas con sello nacional. Pero sólo un puñado de bodegas son las que destellan y dominan el negocio. ¿Cuáles son, qué tipo de vinos exportan a los mercados internacionales y por qué valores?”
El negocio vitivinícola está en pleno auge. Durante los primeros seis meses del año, las bodegas argentinas exportaron vinos fraccionados por más de u$s305 millones, lo que implicó un incremento del 20% con respecto al mismo período de 2009, con lo cual se transformó en una de las industrias del rubro alimentos y bebidas más exitosas a nivel nacional.
Es un hecho. El mundo consume cada vez más vino argentino, y el constante incremento de los niveles de market share en mercados estratégicos, como Estados Unidos, Brasil o Canadá, son una prueba de ello.
A modo de ejemplo, Mario Giordano, gerente de Wines of Argentina, estimó que “este año las etiquetas nacionales acapararán el 8% del negocio en Estados Unidos” –la gran meca para el vino a nivel mundial-, una cifra considerable, dado que hace apenas dos años el nivel de market share no superaba el 4 por ciento.
En concreto, entre enero y junio salieron al mundo 364 bodegas, que llevaron a hoteles, restaurantes y góndolas del mundo cerca de 1.800 marcas distintas, lo que implicó un incremento de casi 10% en relación al año pasado. De este modo, en promedio, cada compañía comercializa cerca de cinco etiquetas distintas.
Sin embargo, puesto en perspectiva, Giordano aseguró a iProfesional.com que todavía queda un largo camino por delante al destacar que “en el mundo hay cerca de 900.000 etiquetas diferentes”.
Más allá del potencial que la industria tiene de cara al futuro, lo cierto es que durante los primeros seis meses del año desde los puertos y los pasos fronterizos se enviaron al mundo 124,4 millones de botellas. Esto implica que, cada hora que pasa, se comercializan –en promedio- unas 28.800 unidades en el exterior.
Sin embargo, un puñado de bodegas son las responsables de los grandes volúmenes. ¿Quiénes son, qué vinos exportan y que ingreso de divisas generan?
A modo de ejemplo, Mario Giordano, gerente de Wines of Argentina, estimó que “este año las etiquetas nacionales acapararán el 8% del negocio en Estados Unidos” –la gran meca para el vino a nivel mundial-, una cifra considerable, dado que hace apenas dos años el nivel de market share no superaba el 4 por ciento.
En concreto, entre enero y junio salieron al mundo 364 bodegas, que llevaron a hoteles, restaurantes y góndolas del mundo cerca de 1.800 marcas distintas, lo que implicó un incremento de casi 10% en relación al año pasado. De este modo, en promedio, cada compañía comercializa cerca de cinco etiquetas distintas.
Sin embargo, puesto en perspectiva, Giordano aseguró a iProfesional.com que todavía queda un largo camino por delante al destacar que “en el mundo hay cerca de 900.000 etiquetas diferentes”.
Más allá del potencial que la industria tiene de cara al futuro, lo cierto es que durante los primeros seis meses del año desde los puertos y los pasos fronterizos se enviaron al mundo 124,4 millones de botellas. Esto implica que, cada hora que pasa, se comercializan –en promedio- unas 28.800 unidades en el exterior.
Sin embargo, un puñado de bodegas son las responsables de los grandes volúmenes. ¿Quiénes son, qué vinos exportan y que ingreso de divisas generan?
Catena, al tope
Al analizar el ranking de los vinos más exitosos, se desprende que apenas unas 30 marcas se quedan con casi el 40% del negocio de exportación.
Y la que más se vende en el mundo actualmente es Alamos, que en lo que va del año generó envíos por más de u$s12 millones, muy por encima del resto de sus competidores.
Desde Catena Zapata, la tradicional bodega mendocina y una de las más reconocidas en el negocio del vino, destacaron que la clave para posicionar esta marca como la más valiosa de la Argentina en los mercados internacionales fue la “excelente relación precio-calidad demostrada por los puntajes de los más reconocidos críticos a nivel mundial”.
Cerca del 80% de la producción de esta línea se destina a los mercados externos. En concreto,llega a más de 40 países, entre los que se destacan Reino Unido, Brasil, Holanda y Estados Unidos, donde el precio de cada botella asciende a los u$s12.
Consultados sobre las características que permiten que este vino sea tan “cosmopolita” y alcance estos niveles de exportación, desde Catena destacaron que “el Malbec principalmente tiene una suavidad y una dulzura muy particular que lo hace diferente a cualquier otro vino de otras regiones del mundo”.
No es para menos, el 65% de lo que produce la bodega en sus dos establecimientos –uno en Agrelo y otro en Valle de Uco- está compuesto por esta variedad emblemática de la Argentina.
La compañía es una de las más reconocidas del país por su alto nivel de calidad. De hecho, Nicolás Catena, el propietario, fue uno de los primeros en el país en hacer hincapié en la necesidad de diferenciar los vinos en relación a la tipicidad varietal.
Además, construyeron parte del camino para la industria cuando en 1993 comenzaron a exportar el Alamos a u$s10, rompiendo con la impresión que se tenía de la Argentina en ese entonces, cuando se pensaba que sólo producía vinos baratos.
Con la “Z” de Zuccardi
En el ranking, otro peso pesado de la industria del vino es Familia Zuccardi, que tiene el segundo vino más exportado -en valores-. Se trata de Fuzion, una línea que generó un ingreso de u$s8 millones
En diálogo con este medio, José “Pepe” Zuccardi, propietario de la bodega ubicada en Maipú, Mendoza, destacó que “las exportaciones de Fuzion han venido creciendo muy fuerte en los últimos años”, con especial eje en el mercado canadiense, donde se destina el grueso de la producción y que hoy, además, capta el 14% de todos los vinos argentinos.
Según Zuccardi, “Fuzion es un rango de vinos, compuesto por Fuzion Alta, que es una categoría reserva, los varietales, los bivarietales y Fuzion Orgánica”.
El bodeguero sostuvo que “su éxito tiene que ver con el proceso de producción: utilizamos uvas sanas y maduras, que nos otorgan un producto de mucha complejidad pero con elegancia. Es una muestra de los vinos que la Argentina puede ofrecer”.
En el ranking, Familia Zuccardi también coló al Santa Julia en el puesto 26, con ventas al mundo por u$s2,2 millones y al Fuzion Alta (puesto 29, con u$s2,1 millones).
Otra joya mendocina
En el tercer puesto de los vinos más exitosos de la Argentina se ubica otro ejemplar de Catena Zapata. En este caso, se trata de la línea Catena, que logró envíos por u$s7,7 millones durante el primer semestre.
Desde la bodega detallaron que estos vinos, que son 100% varietales -Cabernet Sauvignon, Malbec y Chardonnay-, "tienen la particularidad de que se elaboran con uvas provenientes de diferentes lotes. Cada viñedo se cosecha y prepara por separado, para luego integrar el corte final”.
”Al cortar componentes de diferentes terroirs o altitudes, buscamos crear un vino más expresivo y balanceado. Si bien sabemos que la mayoría de los vinos Catena suelen consumirse rápido, hemos comprobado que envejecen maravillosamente bien, después de 10 o 20 años”, destacaron.
El Catena tiene acceso a más de 55 mercados. Los principales son Estados Unidos, Brasil y Canadá. Entre los máximos reconocimientos, en lo que va del año, se destacan los 91 puntos de Wine Spectator y los 91 puntos de The Wine Advocate que recibió el Malbec 2007.
Un vino para todos los días
En el cuarto puesto del ranking se destaca Uvita, un producto de RPB SA. Para aquellos desprevenidos, cabe destacar que es una de las tres principales elaboradoras de vinos de consumo masivo de la Argentina.
El Uvita generó ventas por más de u$s6 millones. Sin embargo, considerando los volúmenes es, lejos, el más exportado del país. El tema está en su bajo precio: mientras que una caja de este vino tiene un valor FOB de u$s8, el Alamos se ubica en un rango superior a los u$s31.
Según datos de Área del Vino, hoy los despachos de esta bodega suman 120 millones de litros a mercado interno, mientras que 27 millones son destinados a exportaciones.
"Uvita es una marca que se ha mantenido muy sólida a través del tiempo, altamente reconocida por sus consumidores, referente de la categoría y apoyada por un producto que se destaca por su alta calidad percibida”, sostuvo Julio Caminos, gerente de la compañía.
La marca Uvita -el vino argentino más consumido en el exterior- se comercializa en tetrabrik.Por su parte, otro producto de RPB, Uvita de Plata, se exporta en botella y ocupa el puesto número 30 en valores y el escalón número 12 en cantidades.
“Esta no es una marca nueva, tiene una gran trayectoria en el mercado, de muchos años y ha logrado posicionar su liderazgo en base a su calidad, distribución y a un vínculo con sus consumidores que se sigue afianzando con el paso del tiempo", recalcó el directivo.
La bodega de los “tres vientos”
Otra marca de vinos que alcanzó un lugar destacable en el ranking es Trivento, una línea que lleva el nombre de la joven pero reconocida bodega mendocina.
La compañía, propiedad de la empresa de capitales chilenos Concha y Toro, inició sus actividades a mediados de los noventa en Maipú, donde hoy posee una capacidad de guarda de 30 millones de litros y cuenta con cerca de 4.000 barricas de roble francés y americano.
En diálogo con este medio, Mónica Caamaño, gerente de Marketing de Trivento, sostuvo que, “se trata de la marca que tiene la mayor llegada a los mercados mundiales”.
En efecto, hoy en día esta línea está presente en más de 100 países.
“Quisimos crear una marca para que, cuando un consumidor de Estados Unidos viaja a una remota isla del Caribe, por ejemplo, también encuentre su vino. La idea de la globalidad es que uno pueda recorrer el mundo y descorchar su botella favorita. Es así como apostamos por los grandes mercados, pero también por los más pequeños”, sostuvo la experta.
Actualmente exportan el 80% de la producción y llegan a países no tradicionales como Islandia, donde son la bodega argentina número uno, o Bahamas.
Trivento es una marca que está conformada por un rango de productos, que va desde el segmento premium hasta el súper premium. Es decir que incluye vinos jóvenes hasta aquellos que fueron criados en roble, tras un paso de seis a ocho meses en barrica.
“El portfolio se compone de diez varietales distintos. Esto nos permite llegar a muchos mercados con una oferta a la medida de cada necesidad. El Malbec y el Chardonnay son la base de la marca Trivento, pero contamos con otras propuestas, como Merlot o Bonarda”, recalcó.
Dentro de este rango, destacó el Golden Reserve, un vino súper premium al que hace pocos meses Wine Spectator le adjudicó 90 puntos.
Caamaño sostuvo que esperan cerrar un muy buen año en cuanto a ventas al mundo, “en sintonía con las tasas que está mostrando la industria”.
Luces y sombras del sector
Si bien las perspectivas son buenas para las bodegas, Giordano, desde Wines of Argentina, alertó que “los horizontes negativos pasan por las variables domésticas: inflación, -que se financia con el freno del tipo de cambio-, falta de crédito, además de pérdida de la rentabilidad”.
En este contexto, Zuccardi alertó que 2010 no fue un año fácil para la industria en general: “Los valores de las uvas crecieron sustancialmente y ha habido aumentos en numerosos insumos, mientras que el dólar se ha mantenido estable”.
“Esto nos ha obligado a elevar los niveles de precios de exportación. Habrá que evaluar de ahora en más cómo impacta la medida. Pero más allá de los efectos, la verdad es que nadie tenía otra alternativa”, disparó.
A pesar de estas luces de alerta, el vino argentino sigue ganando adeptos y se prepara para batir todos los récords en este 2010.
Juan Diego Wasilevsky
vinosybodegas@iprofesional.com
(c) iProfesional.com
Al analizar el ranking de los vinos más exitosos, se desprende que apenas unas 30 marcas se quedan con casi el 40% del negocio de exportación.
Y la que más se vende en el mundo actualmente es Alamos, que en lo que va del año generó envíos por más de u$s12 millones, muy por encima del resto de sus competidores.
Desde Catena Zapata, la tradicional bodega mendocina y una de las más reconocidas en el negocio del vino, destacaron que la clave para posicionar esta marca como la más valiosa de la Argentina en los mercados internacionales fue la “excelente relación precio-calidad demostrada por los puntajes de los más reconocidos críticos a nivel mundial”.
Cerca del 80% de la producción de esta línea se destina a los mercados externos. En concreto,llega a más de 40 países, entre los que se destacan Reino Unido, Brasil, Holanda y Estados Unidos, donde el precio de cada botella asciende a los u$s12.
Consultados sobre las características que permiten que este vino sea tan “cosmopolita” y alcance estos niveles de exportación, desde Catena destacaron que “el Malbec principalmente tiene una suavidad y una dulzura muy particular que lo hace diferente a cualquier otro vino de otras regiones del mundo”.
No es para menos, el 65% de lo que produce la bodega en sus dos establecimientos –uno en Agrelo y otro en Valle de Uco- está compuesto por esta variedad emblemática de la Argentina.
La compañía es una de las más reconocidas del país por su alto nivel de calidad. De hecho, Nicolás Catena, el propietario, fue uno de los primeros en el país en hacer hincapié en la necesidad de diferenciar los vinos en relación a la tipicidad varietal.
Además, construyeron parte del camino para la industria cuando en 1993 comenzaron a exportar el Alamos a u$s10, rompiendo con la impresión que se tenía de la Argentina en ese entonces, cuando se pensaba que sólo producía vinos baratos.
Con la “Z” de Zuccardi
En el ranking, otro peso pesado de la industria del vino es Familia Zuccardi, que tiene el segundo vino más exportado -en valores-. Se trata de Fuzion, una línea que generó un ingreso de u$s8 millones
En diálogo con este medio, José “Pepe” Zuccardi, propietario de la bodega ubicada en Maipú, Mendoza, destacó que “las exportaciones de Fuzion han venido creciendo muy fuerte en los últimos años”, con especial eje en el mercado canadiense, donde se destina el grueso de la producción y que hoy, además, capta el 14% de todos los vinos argentinos.
Según Zuccardi, “Fuzion es un rango de vinos, compuesto por Fuzion Alta, que es una categoría reserva, los varietales, los bivarietales y Fuzion Orgánica”.
El bodeguero sostuvo que “su éxito tiene que ver con el proceso de producción: utilizamos uvas sanas y maduras, que nos otorgan un producto de mucha complejidad pero con elegancia. Es una muestra de los vinos que la Argentina puede ofrecer”.
En el ranking, Familia Zuccardi también coló al Santa Julia en el puesto 26, con ventas al mundo por u$s2,2 millones y al Fuzion Alta (puesto 29, con u$s2,1 millones).
Otra joya mendocina
En el tercer puesto de los vinos más exitosos de la Argentina se ubica otro ejemplar de Catena Zapata. En este caso, se trata de la línea Catena, que logró envíos por u$s7,7 millones durante el primer semestre.
Desde la bodega detallaron que estos vinos, que son 100% varietales -Cabernet Sauvignon, Malbec y Chardonnay-, "tienen la particularidad de que se elaboran con uvas provenientes de diferentes lotes. Cada viñedo se cosecha y prepara por separado, para luego integrar el corte final”.
”Al cortar componentes de diferentes terroirs o altitudes, buscamos crear un vino más expresivo y balanceado. Si bien sabemos que la mayoría de los vinos Catena suelen consumirse rápido, hemos comprobado que envejecen maravillosamente bien, después de 10 o 20 años”, destacaron.
El Catena tiene acceso a más de 55 mercados. Los principales son Estados Unidos, Brasil y Canadá. Entre los máximos reconocimientos, en lo que va del año, se destacan los 91 puntos de Wine Spectator y los 91 puntos de The Wine Advocate que recibió el Malbec 2007.
Un vino para todos los días
En el cuarto puesto del ranking se destaca Uvita, un producto de RPB SA. Para aquellos desprevenidos, cabe destacar que es una de las tres principales elaboradoras de vinos de consumo masivo de la Argentina.
El Uvita generó ventas por más de u$s6 millones. Sin embargo, considerando los volúmenes es, lejos, el más exportado del país. El tema está en su bajo precio: mientras que una caja de este vino tiene un valor FOB de u$s8, el Alamos se ubica en un rango superior a los u$s31.
Según datos de Área del Vino, hoy los despachos de esta bodega suman 120 millones de litros a mercado interno, mientras que 27 millones son destinados a exportaciones.
"Uvita es una marca que se ha mantenido muy sólida a través del tiempo, altamente reconocida por sus consumidores, referente de la categoría y apoyada por un producto que se destaca por su alta calidad percibida”, sostuvo Julio Caminos, gerente de la compañía.
La marca Uvita -el vino argentino más consumido en el exterior- se comercializa en tetrabrik.Por su parte, otro producto de RPB, Uvita de Plata, se exporta en botella y ocupa el puesto número 30 en valores y el escalón número 12 en cantidades.
“Esta no es una marca nueva, tiene una gran trayectoria en el mercado, de muchos años y ha logrado posicionar su liderazgo en base a su calidad, distribución y a un vínculo con sus consumidores que se sigue afianzando con el paso del tiempo", recalcó el directivo.
La bodega de los “tres vientos”
Otra marca de vinos que alcanzó un lugar destacable en el ranking es Trivento, una línea que lleva el nombre de la joven pero reconocida bodega mendocina.
La compañía, propiedad de la empresa de capitales chilenos Concha y Toro, inició sus actividades a mediados de los noventa en Maipú, donde hoy posee una capacidad de guarda de 30 millones de litros y cuenta con cerca de 4.000 barricas de roble francés y americano.
En diálogo con este medio, Mónica Caamaño, gerente de Marketing de Trivento, sostuvo que, “se trata de la marca que tiene la mayor llegada a los mercados mundiales”.
En efecto, hoy en día esta línea está presente en más de 100 países.
“Quisimos crear una marca para que, cuando un consumidor de Estados Unidos viaja a una remota isla del Caribe, por ejemplo, también encuentre su vino. La idea de la globalidad es que uno pueda recorrer el mundo y descorchar su botella favorita. Es así como apostamos por los grandes mercados, pero también por los más pequeños”, sostuvo la experta.
Actualmente exportan el 80% de la producción y llegan a países no tradicionales como Islandia, donde son la bodega argentina número uno, o Bahamas.
Trivento es una marca que está conformada por un rango de productos, que va desde el segmento premium hasta el súper premium. Es decir que incluye vinos jóvenes hasta aquellos que fueron criados en roble, tras un paso de seis a ocho meses en barrica.
“El portfolio se compone de diez varietales distintos. Esto nos permite llegar a muchos mercados con una oferta a la medida de cada necesidad. El Malbec y el Chardonnay son la base de la marca Trivento, pero contamos con otras propuestas, como Merlot o Bonarda”, recalcó.
Dentro de este rango, destacó el Golden Reserve, un vino súper premium al que hace pocos meses Wine Spectator le adjudicó 90 puntos.
Caamaño sostuvo que esperan cerrar un muy buen año en cuanto a ventas al mundo, “en sintonía con las tasas que está mostrando la industria”.
Luces y sombras del sector
Si bien las perspectivas son buenas para las bodegas, Giordano, desde Wines of Argentina, alertó que “los horizontes negativos pasan por las variables domésticas: inflación, -que se financia con el freno del tipo de cambio-, falta de crédito, además de pérdida de la rentabilidad”.
En este contexto, Zuccardi alertó que 2010 no fue un año fácil para la industria en general: “Los valores de las uvas crecieron sustancialmente y ha habido aumentos en numerosos insumos, mientras que el dólar se ha mantenido estable”.
“Esto nos ha obligado a elevar los niveles de precios de exportación. Habrá que evaluar de ahora en más cómo impacta la medida. Pero más allá de los efectos, la verdad es que nadie tenía otra alternativa”, disparó.
A pesar de estas luces de alerta, el vino argentino sigue ganando adeptos y se prepara para batir todos los récords en este 2010.
Juan Diego Wasilevsky
vinosybodegas@iprofesional.com
(c) iProfesional.com
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