¿Sabía usted que la alimentación puede reflejarse en el aspecto de nuestra piel? La carencia de determinadas vitaminas o minerales puede verse reflejado en nuestra piel, con lo cual es de suma importancia el mantener una dieta balanceada y rica en vitaminas y minerales.
A continuación veremos algunas vitaminas y minerales y daremos sus características para que sepa en qué medida éstas pueden afectar el aspecto de su piel.
Comencemos hablando de las vitaminas:
La vitamina A, también conocida como Retinol.
Esta vitamina se encuentra presente en alimentos de origen vegetal como la manteca, los quesos, huevos, etc., y también en frutas y verduras tales como manzanas, zanahorias, naranjas, espinacas, etc. Pero debe tener en cuenta que al freír estos alimentos la vitamina A se pierde, por lo tanto se recomienda no hacerlo. Esta vitamina tiene como propiedad, proporcionar suavidad, favorecer la cicatrización y reforzar las defensas naturales de la piel.
Esta vitamina se encuentra presente en alimentos de origen vegetal como la manteca, los quesos, huevos, etc., y también en frutas y verduras tales como manzanas, zanahorias, naranjas, espinacas, etc. Pero debe tener en cuenta que al freír estos alimentos la vitamina A se pierde, por lo tanto se recomienda no hacerlo. Esta vitamina tiene como propiedad, proporcionar suavidad, favorecer la cicatrización y reforzar las defensas naturales de la piel.
La vitamina B3 está presente en las carnes magras, el pollo, el pescado, el hígado y las nueces. Su función principal es preparar y proteger la piel del sol, como así también prevenir algunas alergias solares, por esto mismo estos productos deben ser consumidos durante la primavera y el verano especialmente.
La vitamina B6 se encuentra en el pollo, la carne de cerdo, el hígado, papas, bananas, alimentos integrales y en otras frutas y verduras y colaboran equilibrando las pieles grasas, reduciendo la producción de sebo de las glándulas sebáceas.
La vitamina C se encuentra especialmente en los cítricos y en las verduras de hojas verdes, pero se debe tener en cuenta que es importante comer estos alimentos frescos ya que dicha vitamina se destruye con el calor. El consumo de esta vitamina favorece, al igual que ocurre con la vitamina A, la cicatrización de la piel; además colabora en el aumento de las defensas del organismo contra las infecciones. Es indispensable para la producción del colágeno, es antioxidante y protege a la piel de los rayos ultravioletas.
La vitamina E está presente en los aceites (girasol, trigo y oliva), en los cereales integrales, las legumbres, el pescado, las nueces, la yema del huevo y la carne. La acción principal de la vitamina E es retrasar el envejecimiento de la piel.
Pero también los minerales son importantes para lucir una piel sana, veamos algunos ejemplos:
El cobre ayuda a revitalizar y fortalecer la piel y está presente en las frutas, las legumbres y las ostras.
El zinc ayuda a proteger la piel de los rayos ultravioletas; al igual que la vitamina C, colabora en la formación del colágeno y además tiene propiedades antiinflamatorias. Al zinc lo podemos encontrar en la carne, la leche, los huevos y los mariscos.
El selenio favorece a retrasar el envejecimiento prematuro de la piel y está presente en los champiñones, los huevos y diferentes productos lácteos.
Además se ha demostrado recientemente que el elevado consumo de hidratos de carbono, grasas saturadas, trans, ácidos grasos omega 6 y productos lácteos favorecerían la secreción sebácea, provocando de esta manera un aumento en el desarrollo del acné.
Por todo lo dicho, debe tener en cuenta que una dieta equilibrada no solamente lo ayudará a tener un organismo sano, sino que además favorecerá para que su piel luzca sana y bien.
Fuente: http://www.cuidartupiel.com/
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