Adrián Fernández se proclama vencedor del VI Campeonato de baristas de Asturias, como en 2010 y 2011, en una reñida jornada en la que tuvo que demostrar su maña con las mezclas y los aromas
Lara A. CHARRO Algo tan sencillo como tomarse un café puede convertirse en todo un arte. Así ocurrió ayer en el salón de actos del Palacio de Congresos de la Feria de Muestras, donde tuvo lugar el VI Campeonato de baristas de Asturias. La competición, que tenía como objeto elegir al representante de la región para el campeonato nacional, contó con la presencia de seis expertos hosteleros asturianos dispuestos a deleitar a todos con su maña para combinar aroma y sabor. Al final de la jornada, que comenzó con entrenamientos hacia las 10.00 horas, fue Adrián Fernández Menéndez, de la cafetería Coffee Loft, de Gijón, el elegido como mejor barista de la región, un reconocimiento que ya tuvo en las ediciones de 2010 y 2011.
Javier Álvarez, durante la prueba celebrada ayer por la tarde en el Palacio de Congresos. Marcos León
Para demostrarlo, tuvo que superar a sus compañeros en diferentes pruebas, que comenzaron con la preparación de dos expresos, seguidos de dos capuchinos, «una de las partes más bonitas», según palabras de la organizadora Carolina Otero. Aquí los baristas tuvieron que demostrar su experiencia con el «Latte art» (o arte de la leche), consiguiendo servir la leche y la espuma con formas que empiezan a ser ya características, como las espigas o los corazones.
Se completó el campeonato con pruebas de coctelería, en las que tuvieron que preparar una mezcla con alcohol y otra sin él, aunque, por supuesto, no podía faltar el café en ninguna. Adrián Fernández, que no pudo presentarse en la pasada edición, actuó ayer en quinta posición.
Antes de él, se había encargado de inaugurar el escenario del salón de actos Miguel Pérez, que participó en un campeonato de baristas ayer por primera vez. Pérez se animó con una mezcla de café y mojito sin alcohol para uno de los cócteles, al que añadió un toque de «menta que cultivé en mi casa», como apuntó durante su actuación. Este barista, que trabaja en la cafetería Oicos, en Jarrio, dio paso a Javier Álvarez, dueño del Xaréu, un café-karaoke próximo a la plaza de toros de Gijón, que sorprendió con el acabado azul intenso de sus capuchinos, inspirado en los «cupcakes».
El tercero en hacer pericias con el café fue el trabajador de El Recuelo, en Oviedo. Roberto Martínez eligió un café dulce y afrutado para su estreno. A él le siguió Amado Llano, de cafetería Vilas en Piedras Blancas, campeón de 2012. «La experiencia de defender a tu región fuera de ella es fenomenal», destacó. El último en actuar, Adrián Martínez, lo hizo después del vencedor, Adrián Fernández. Martínez procedía de la cafetería gijonesa Fifty & Fifty, y fue el encargado de cerrar el acto a las 18.30 horas.
El ganador participará los días 4, 5 y 6 de octubre en el Campeonato nacional de baristas en Bilbao, adonde acudirá dispuesto a dejar a Asturias con el café bien alto.
Fuente: La Nueva España
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