Ferrán Centelles, ex sumiller de el Bullí y actual asesor del club Wineissocial desvela para Mujerhoy.com a través de este artículo la relación entre la personalidad y el vino dando respuesta al reto que le pusimos: dime cómo eres y te diré qué vino te va a encantar.
La célebre frase del filósofo Romano Marco Tulio Cicerón, nos sirve como inmejorable introducción a este artículo. “Los hombres son como los vinos: la edad agria los malos y mejora los buenos”.
La comparativa es una de las formas más efectivas y entendibles de comunicar. Relacionar personas o caracteres con vino es un ejercicio realizado por muchos pensadores clásicos. Esta línea de comunicación también ha dado paso a obras muy interesantes entre las que se encuentran "La guía del vino de chicas", de Susy Atkins (ed. Mitchell Beazlet) o más recientemente "Los vinos de tu vida", de Meritxell Falgueras (Angle Editorial). Curiosamente, estas dos obras han sido realizadas por mujeres, con lo que sin duda reconozco que ellas o vosotras tenéis un sexto sentido más agudizado para hacer este tipo de relaciones entre vino y personas.
Este artículo no pretende más que ser un ejercicio divertido en esta línea y proponer algunas buenas botellas para diferentes personalidades de manera muy subjetiva y personal. Recordar que los vinos tienen la capacidad de transmitir más allá del propio gusto y que al final sois vosotras las que decidiréis si estas correspondencias se adecuan a vuestro paladar.
Si te consideras una persona pacificadora, que te gusta que todo esté en armonía a tu alrededor y evitas los conflictos, seguramente te pegará un vino que gusta a todo el mundo, un vino de perfil fácil, agradable y jugoso, un vino sin complicaciones, como podrían ser los Riojas Crianzas de estilo moderno.
Un ejemplo: Paco García Crianza Tinto. Rioja.
Si eres de aquellas mujeres que consigue hacer mejores a las personas que le rodean, seguramente te interesará conocer una variedad llamada Moscatel, un tipo de uva perfumada, fragante y alegre que se utiliza mucho para mezclar con otros y aportar chispa y dinamismo.
Un ejemplo: Arinyanas Seco Sobre Lías Blanco. Málaga.
A las perfeccionistas les encaja un vino con mucho equilibrio, donde nada descuadre, un vino perfecto. Un vino largo, complejo, intenso pero que tenga sobriedad y elegancia y muchísima calidad. La uva Chardonnay suele dar vinos blancos de este perfil perfeccionista
Ejemplo: Chivite Chardonnay Finca Villatuerta Blanco. Navarra.
Luego están las mujeres enamoradizas y románticas, aquellas que suelen encontrar momentos únicos con asiduidad. En ese caso, te encantarán las burbujas y el color rosáceo. Un Cava rosado refrescante, alegre que tenga alguna dosis de pasión será el vino que debas probar.
Ejemplo: Cava Berdié Rosado Amor. Penedès
Si lo que tienes es un carácter fuerte, si te gusta causar impacto a tu alrededor y eres una persona de convicciones fijas, entonces tienes que degustar un vino con cuerpo, potente, pero que tenga parte de atrevimiento y valentía. Nada cómo un Cabernet Sauvignon de alguna zona cálida para recibir impacto, sabor y potencia.
Ejemplo: Carabibas VS Tinto. Alicante
Si eres una persona reflexiva y calculadora, no tomas una decisión hasta haberla meditado mucho, entonces necesitas probar lo que llamamos un vino de meditación, un vino de aquellos que te hace pensar y que tiene tanta complejidad que con sólo una copa puedes pasarte toda una tarde para intentar descifrarlo. Estos vinos suele tener mucha vejez y estar criados en barrica por periodos superiores a los 30 años.
Ejemplo: Moscatel Capricho de Goya Dulce. Navarra
Si te consideras una persona clásica, fiel a tus pasiones y con buen gusto para lo de toda la vida, entonces tienes que buscar algún vino insignia, de esos clásicos que no pasan de moda como podría ser el Ribera del Duero Crianza, un gusto que todo el mundo reconoce pero que no por eso quiere decir que sea menos delicioso.
Ejemplo: Valsotillo Crianza Tinto. Ribera del Duero
Finalmente si eres una persona creativa y atrevida, si siempre estas pensando en cosas nuevas y diferentes, entonces debes degustar un vino arriesgado, de gustos poco tradicionales y que llene de diversión. Una mezcla inédita que no se había experimentado antes, un mix de Hondarribi Zuri (una variedad Vasca) con Riesling (una variedad Alemana) que dan un vino blanco de aroma cautivador y de gusto tremendamente agradable.
Un ejemplo: Itsasmendi 7 Blanco. Txackolí
Por último, cabe recordar que más allá de la personalidad, el momento también es importante y que cada vino tiene su momento ideal.
Tras haber sido sumiller de El Bulli, Ferran Centelles es actualmente cofundador de Wineissocial.com, un club de vinos online que permite descubrir vinos adaptados al paladar de cada persona.
Fuente: mujerhoy.com
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