Es un bizcocho muy sencillo, pero para que nos quede perfecto es muy importante el batido de las yemas con el azúcar. Debemos dedicar al menos 20 minutos para que estas tripliquen de volumen y se llenen de burbujas de aire. Podemos usar cualquier batidora de mano o de barillas para ello, y si nos atrevemos hacerlo manualmente. Es importante este paso si queremos un bizcocho esponjoso y tierno. Conozcamos la receta.
- Comenzamos batiendo los huevos con el azúcar. Lo haremos por lo menos durante 20 minutos. Es importante este paso para que nos salga adecuadamente el bizcocho. El huevo junto con el azúcar triplicará al menos su volumen una vez que términos.
- A continuación le incorporamos la harina que tamizaremos previamente. Lo haremos manualmente y suavemente para no perder volumen. Usaremos un molde de 22 centímetros y forramos por el fondo. Podemos untar mantequilla por los lados o simplemente dejarlo sin nada.
- El horno precalentado a 180 grados. Cocemos a 30-40 minutos, va a depender de nuestro horno. Antes de sacarlo comprobamos con un palillo fino en el centro si sale seco. Dejamos en el molde unos 5 minutos para que temple y desmoldamos. Colocamos sobre una rejilla y dejamos enfriar totalmente.
- Para el acabado usaremos azúcar glas y podemos servir inmediatamente. Acompañado de un buen helado de vainilla es un manjar.
Fuente: asopaipas
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