Evita que al pelarlas, las patatas cojan colores extraños porque se oxigenan antes de ser cocinadas
La patata es un alimento básico en la dieta mediterránea española. Esta hortaliza no falta jamás en las despensas de nuestro país y es utilizada para elaborar multitud de platos. Desde la tortilla de patata, pasando por las patatas guisadas con carne estofada o las habituales patatas fritas para acompañar a una carne, el famoso tubérculo es un manjar que pocos españoles rechazan, según destaca el diario Las Provincias.
Las patatas tienen un alto grado de vitamina C y B6 y son ricas en minerales como el magnesio, el potasio, el manganeso y el fósforo. Es un alimento que se conserva muy bien y, por ello, se puede almacenar en la despensa durante bastante tiempo. Eso sí, durante los meses de calor conviene resguardarlas en un sitio fresco para evitar que se pudran.
Patatas. (iStock) |
Sin embargo, una vez peladas, tienden a estropearse rápidamente. En ocasiones, solemos ir pelando las patatas mientras se cocinan otros alimentos para ir ganando tiempo lo que provoca que se oxigenen y cojan colores extraños antes de ser cocinadas. En ese momento, la patata se pone de color marrón, gris o, incluso, negro si está mucho tiempo pelada antes de ser frita o guisada.
Mételas en agua la noche anterior
Pero existen algunos trucos para evitar que eso pase. La mejor opción es pelarlas el día anterior y dejarlas en un bol en agua fría dentro de la nevera. De esta manera, la hortaliza no perderá las propiedades y mantendrá un aspecto perfecto antes de ser cocinada. Eso sí, las patatas no deben estar demasiado tiempo dentro del agua porque acabarán oxidándose de igual manera.
En todo caso, conviene que las patatas estén enteras cuándo se metan en agua porque, de esta manera, tendrán menos tasa de absorción de agua. Otro truco muy extendido pasa por rociar las patatas con vinagre o con zumo de limón antes de ser cocinadas.
Aunque es menos habitual, estas dos opciones también permiten que la hortaliza no se oxigene y coja mal color. En todo caso, si las patatas son peladas y fritas en el mismo instante, el alimento conservará un aspecto impecable. No esperes demasiado a cocinarlas o bien aplica alguno de los trucos que te hemos contado.
Mételas en agua la noche anterior
Pero existen algunos trucos para evitar que eso pase. La mejor opción es pelarlas el día anterior y dejarlas en un bol en agua fría dentro de la nevera. De esta manera, la hortaliza no perderá las propiedades y mantendrá un aspecto perfecto antes de ser cocinada. Eso sí, las patatas no deben estar demasiado tiempo dentro del agua porque acabarán oxidándose de igual manera.
En todo caso, conviene que las patatas estén enteras cuándo se metan en agua porque, de esta manera, tendrán menos tasa de absorción de agua. Otro truco muy extendido pasa por rociar las patatas con vinagre o con zumo de limón antes de ser cocinadas.
Aunque es menos habitual, estas dos opciones también permiten que la hortaliza no se oxigene y coja mal color. En todo caso, si las patatas son peladas y fritas en el mismo instante, el alimento conservará un aspecto impecable. No esperes demasiado a cocinarlas o bien aplica alguno de los trucos que te hemos contado.
Fuente: Alimente - El Confidencial
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