#CAFE ⛾ | 6 cafés que no puedes dejar de probar

El café irlandés es una de las combinaciones que más triunfa.

La preparación de café admite múltiples combinaciones; descubrimos cuatro maneras, más y menos conocidas, que seguro te sorprenderán

Que el café es una de las bebidas más populares del mundo es una afirmación rotunda que no sorprenderá a nadie. Como tampoco lo hará el apuntar que forma parte de un mundo tremendamente amplio, ya que podemos encontrar café de múltiples variedades y sabores, así como en diversos formatos (grano, molido, cápsula, etc.).

Pero, además, se trata de una de las bebidas más versátiles del mundo, ya que el café puede prepararse y tomarse de innumerables formas. Solo, cortado y con leche son algunas de las más populares, pero la preparación de esta bebida también admite múltiples combinaciones, algunas más conocidas y otras menos, que descubrimos a continuación.

Seis cafés que no puedes dejar de probar

1. Carajillo. Es, sin duda, una de formas de tomar café más tradicionales en el Estado, siendo habitual tomarla en las sobremesas. El carajillo, un clásico de la cultura cafetera española, es una bebida potente y aromática, capaz de ensimismar cualquier paladar al tomarlo gracias a su sabor. Su preparación no tiene ningún tipo de complicación, pues simplemente consiste en mezclar café con algún tipo de bebida alcohólica como brandy u otro tipo de licor (coñac, ron anís...). Puede tomarse caliente o frío, siendo habitual añadirle también un poquito de canela en rama, una piel de limón o incluso algunos granos de café tostados.
2. Café irlandés. Hablamos del cóctel cafetero por excelencia. Aunque su valor y popularidad ha ido decayendo entre las generaciones más jóvenes, sigue teniendo un hueco fijo en las cartas de bebidas de bares y restaurantes, siendo el colofón perfecto a una gran comida o cena. Su receta no es para nada compleja, pero resulta vital utilizar productos de calidad. El café irlandés, que combina amargor y dulzor, se prepara con un consciente equilibrio de café y whisky al que se le añade azúcar y nata montada. Agregar un toque de nuez moscada o de canela permitirán redondear la presentación.
3. Café hawaiano. Una versión 'sin alcohol' muy desconocida pero deliciosa. Su preparación es tan sencilla como la de un café con leche, pues entre los ingredientes de este hawaiano solo se encuentran el café (soliendo emplearse un expreso doble) y leche, más concretamente una capa cremosa de la leche de coco tan habitual en Hawái. Para decorarlo, puede coronarse la bebida con ralladura de coco. Es, sin duda, una bebida perfecta que se puede tomar a cualquier temperatura y dedicada a los amantes del coco.
4. Café caribeño. Vuelve a entrar el juego el alcohol, con este café caribeño que se elabora con café caliente (expreso doble), ron y nata montada. Servido en copa de cóctel o en una taza de cappuccino, se trata de una bebida de sabor fuerte y bien cargado, por lo que conviene utilizar una variedad de ron ligero y de calidad.
5. Mocaccino. También denominado café moca o simplemente café con chocolate, es una forma de preparar café que aúna, además de café, leche y chocolate o cacao en polvo. Se toma caliente, aunque en los últimos tiempos se ha popularizado su consumo con hielos, por lo que se trata de una forma de tomar café muy dulce y apta para todo el año.
6. Cafe amerIcano. Al café espreso hay que añadirle la misma cantidad de agua caliente y de esta forma, se obtiene un café más suave, pero que sigue manteniendo el aroma especial de esta bebida. En definitiva, el café americano es un café espresso diluido en agua.

Fuente: Diario Vasco