Pasaron muchos años y muchas cenas, y me hice adicta al sashimi y los nigiris. Aplaudí cuando hace un par de otoños aterrizaba el primer restaurante de ramen en la ciudad. ¡Porque la gastronomía de Japón es mucho más que sushi! Pero eso sólo lo he descubierto tras un delicioso viaje de 22 días por este país…
Gastronomía de Japón, del mar a la mesa.
¿Qué se come en Japón? Pescado. Muy por encima del resto de países del mundo, Japón se mantiene a la cabeza en cuanto a consumo de productos del mar. Junto con el arroz, es su base alimenticia y lo toman incluso para desayunar. Dos datos importantes: resulta más económico que en España, y desde luego que la fruta. Incluso en los mercados, exceptuando los plátanos que importan de Filipinas, la fruta es un producto de lujo. Otro apunte a tener en cuenta es que en Japón los restaurantes son temáticos: si quieres sushi, tenes que ir a un restaurante donde sólo hay pescado. Si quieres ramen, uno de ramen. Incluso hay locales que sólo sirven gyozas o especializados en carne. La cual, por cierto, me pareció cara y no de excesiva calidad. Lo que nunca falla es la presentación: exquisita. La estética es importante a la hora de servir los platos. Y es que todo es armónico en Japón, incluso la gastronomía. Pero vamos con la comida imprescindible de Japón en los diferentes momentos del día.
Desayuno típico japonés.
Antes de viajar al país nipón me preguntaba qué comen los japoneses a diario. La primera mañana en Tokio obtuve la respuesta, cuando me arriesgué a pedir un desayuno japonés en mi alojamiento en Asakusa (el World Travelers House), en lugar de un continental. Soy de las que cree que, para conectar y conocer una cultura, hay que “vivir como ella”. O al menos intentarlo… Y eso traté de hacer. Terminar con dignidad el trozo de pescado asado, la sopa Miso y la verdura. Y el bol de arroz que se hace bola a esas horas intempestivas. Para acompañar, un té verde bastante amargo (y eso que soy consumidora habitual de té). ¿Apetecible?
Mi primer desayuno en Japón
Confieso que días después en Kawaguchiko, a los pies del Fuji, en la preciosa casa rural donde me alojaba (Hostel E-Joy ) solicité un desayuno continental. Aún así, no faltó el arroz ni la sopa de maíz… Aunque tuve un poco de pan, de huevos revueltos y jamón cocido. Tras mi paso por la prefectura de Wakayama empecé a acostumbrarme y a disfrutar de los diferentes tipos de tofu, pescados y verduras asadas al calor de un té sencha.
Desayuno en un ryokan
El almuerzo en Japón.
Bienvenida al reino de la sopa. En puestos callejeros, en máquinas dispensadoras, suave, picante, con fideos gordos o finos… ¡Incluso en pleno agosto! A los japoneses les pirran todos los tipos de sopas, en las que el Ramen es la estrella indiscutible. Se trata de un gran bol con verdura y carne, con o sin huevo, con fideos originarios de China. Otra muy popular es la Soba, sopa de fideos finos de trigo que se suelen servir fríos y con salsa. La típica sopa Miso es todo un clásico a la hora de acompañar un buen plato de sushi, a base de soja o caldo de pescado, a la que se le puede añadir tofu o alga wakame. Los udon (fideos gruesos) también se suelen tomar en sopa, tanto de carne como de pescado. Almorzar un plato de sopa suele ser económico: en torno a 600 – 700 yenes (4 ó 5 euros).
Plato de sopa y tempura con arroz
¿Y cómo es el sushi en Japón?
Envueltos en alga nori y en cama de arroz, de sabor intenso y fresco, muy fresco… El sushi sin duda alguna es el plato más internacional de la gastronomía de Japón. Lo degusté en muchos restaurantes y comprobé que había mucha más variedad de cortes de pescado que en España, así como tipos de huevas, realmente con un gusto bastante fuerte, en algún momento demasiado para mí. Los amantes del atún no pueden dejar de ir a la zona costera de Wakayama, donde presumen de tener el mejor del mundo. Yo lo probé en la bahía de Nachikatsuura y estaba realmente delicioso.
¿Hay comida japonesa que no sea cruda?
Además del Ramen, la Tempura (vegetales, mariscos o carne fritos) el Teriyaki o el yakisoba(tallarines fritos), tres clásicos que también han cruzado fronteras, uno de mis grandes descubrimientos fue el Okonomiyaki. Se le llama la “pizza” japonesa, ya que consiste en una masa de harina, agua, huevo y ñame rallado, a la que se se le añaden varios ingredientes a elección del consumidor y se cocina todo junto a la plancha. Los más típicos son cebolleta, queso, vegetales, kimchi, carne o calamar, todo recubierto por salsa okonomiyaki. En los restaurantes de Monja Street en Tokio, lo preparan delante del cliente.
Okonomiyaki
Hora de la cena.
Las luces se encienden en el mercado de Kyoto… ¿Qué vamos a cenar hoy? Me pregunto… Sin duda uno de mis platos preferidos son las Gyozas, un vicio asiático. Empanadillas fritas o al vapor rellenas de casi cualquier cosa, me recuerdan mucho a los ricos momos que comía en Nepal. En Kanazawa, Alpes Japoneses, probé las más deliciosas de mi vida en un local especializado a 5 minutos de mi hostel, Midnight Rockers, junto al barrio de antiguas casas de samurais. Las había de carne, pescado… Aunque las más ricas, las de puerro y queso.
Gyozas, gastronomía de Japón
Para los carnívoros, dicen que no se pueden ir de Japón sin degustar la ternera de Kobe o la de Hida, esta última de la zona de los Alpes Japoneses. Yo probé esta última y tengo que decir que no me pareció tan exquisita como lo que se paga por ella.
¿Y comida japonesa vegetariana?
En cuanto a comida vegetariana, nunca pensé que el tofu pudiera tener tal variedad de colores y sabores. Un hallazgo culinario en el monasterio – logde de Koyasan donde me hospedé: el Soji-in, donde desayuno y cena es preparada por los monjes según los preceptos del budismo shinton: sólo granos y vegetales. ¡Me encantó!
¿Qué té toman los japoneses?
Embotellado como refresco, para desayunar, en el almuerzo… Los japoneses beben más té que agua. El más popular es el té sencha, verde y suave con el que se suele acompañar las comidas. El té matcha, que da nombre al helado más famoso de Japón, es el que se suele usar en la ceremonia del té en Japón y es té verde en polvo disuelto en agua. El sabor, incluso en helado, es bastante fuerte. ¡A mí me gusta!
Té para acompañar un plato de verduras
Japón a la hora del postre.
La cara más dulce de Japón no podía basarse en otra materia prima que no sea el arroz, la fruta o las judías. Así encontramos los Wasaghi, pastelitos con diferentes formas. El Dorayaki, famoso gracias al personaje de dibujos Doraemon, masa rellena de anko, un dulce de judías rojas. Particularmente, me hice fan del Melopan, un pan dulce de melón que se vendía en las panaderías de Kyoto e Hiroshima.
Pan de melón, gastronomía de Japón
Snaks y bebidas en Japón.
¡Qué gran variedad de snaks y refrescos hay en Japón! El mundo de las máquinas expendedoras se traduce en cientos de refrescos de sabores más o menos familiares. Las chocolatinas pueden ser de sabores de frutas, pero también de té o incluso picantes. Un dato importante: consumir bebidas alcohólicas en un restaurante o bar no es muy económico, tanto la cerveza como el sake. Los precios rondan los 500 ó 600 yenes / unidad. Así que lo mejor, comprarlas en los supermercados donde, además, suelen tener espacios con microondas y mesas o sillas donde poder almorzar. Comer en Japón puede ser caro si tiras siempre de restaurantes, ¡pero siempre hay formas de ahorrar!
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