☕ #CAFE #BEBIDASFRIAS #RECETAS | Aprende tres formas de preparar café frío con estas recetas sencillas

Conviértete en una excelente anfitriona o anfitrión.

Los verdaderos amantes del café saben que existen diversas formas de tomar esta bebida, pues hay versiones sutiles, fuertes, calientes y frías. Por esa razón, hoy te presentamos varias maneras de preparar en casa y en compañía de tus seres queridos.

Aprender diversas formas de hacer esta bebida, disfrutada a escala internacional, es una gran ventaja como anfitrión, pues, el café culturalmente es sinónimo de hospitalidad, amistad y esparcimiento.

De esta manera, cuando conocemos varias recetas es fácil convertirnos en anfitriones destacados.

Los cafés fríos se han puesto muy de moda en bares y restaurantes, por lo que muchas personas han tenido una gran fijación por esta deliciosa bebida.

Sin embargo, en tiempos de pandemia, salir a tomar o comer algo puede ser un poco complicado, ya que, además de incrementar el riesgo al contagio de COVID-19, debemos seguir varios protocolos antes de disfrutar, por eso, muchas personas han desarrollado sus habilidades en la cocina.

Esto no solo ha implicado aprender a preparar muchos alimentos, también se ha incrementado la pasión por la pastelería y el barismo.

Este último mencionado es la especialidad para preparar café de la alta calidad que, además, se enfoca en innovar y crear bebidas teniendo siempre como basé el café.

Aunque los baristas crean bebidas para todos los gustos y gamas como dulces, café con licor, puros o con leche, en esta ocasión hablaremos de las versiones frías.

Estas nacen y se diversifican precisamente a partir de las bebidas calientes, pues, existen tantas versiones “iced” como tipos de café.

¿Cómo se originó el café frío?

La primera versión de café frío es el clásico frappé, el cual, consiste en la mezcla de café instantáneo con hielo, recubierto con espuma.

Según algunas versiones, se originó en durante Feria Internacional del Comercio de Tesalónica de 1957, cuando Loannis Dritsas, representante de la empresa Nestlé, presentaba una bebida chocolatada para niños. Cuando buscaba tomarse su habitual café, no encontró agua caliente, por lo que decidió mezclarlo en una coctelera con agua fría.

Luego de este invento, surgieron nuevas versiones adaptadas a todos los gustos de los amantes del café. Desde, entonces, el verano se convirtió en la época de los frappuccinos, especialmente en Europa.

¿Cómo preparar café frío?

Como hemos mencionado anteriormente, se puede preparar de diversas maneras y, por eso, aquí te dejaremos tres recetas que puedes hace fácilmente en casa para compartir con amigos y seres queridos.

Frapuccino

Ingredientes:

• Café espresso frío
• Leche
• Azúcar granulada
• Jarabe de chocolate
• Hielo
• Crema batida para decorar (opcional)

Preparación:

1. Licua el hielo con el café espresso frío. Luego, añade la leche, el azúcar y el jarabe de chocolate para volver a licuar hasta que el hielo quede completamente triturado.
2. Sírvelo en un vaso y si deseas, decóralo con crema batida.
3. Para obtener un resultado profesional debes tener en cuenta que el café molido debe ser fuerte de modo que el sabor sea más concentrado.
4. Otro truco es usar el hielo ya triturado, ya que ofrece un mejor resultado.

Café dalgona

Ingredientes

• Azúcar granulada
• Café instantáneo
• Agua fría
• Hielo
• Leche

Preparación

1. En un tazón mediano, combine el azúcar, el café y el agua. Batir vigorosamente hasta que la mezcla se vuelva suave y brillante, luego continúe batiendo hasta que espese y mantenga su forma alta y espumosa.
2. Llene un vaso lleno de hielo y leche, luego mezcle y agregue la mezcla de café batido en la parte superior, mezcle antes de beber si lo desea.

Café mocca helado

Ingredientes

• Caffé espresso frío
• Leche semidescremada
• Chocolate derretido
• Azúcar
• Hielo

Preparación

Vierte una taza de café frío en la licuadora junto a 500 ml de leche semidescremada, dos cucharadas de chocolate derretido, dos cucharadas de azúcar y hielo. Licúa todo y sirve con un poco de crema batida.

Rosa Alejandra Silva

Fuente: Nueva Mujer