Como a menudo sucede, el sentido común se retuerce bajo la implacable presión del poder, siendo menos común a medida que el gobernante se aísla del pueblo. Legislar ignorando la naturaleza del hombre, prohibiendo aquello que no puede controlarse, es el germen de cualquier rebelión, el principio de la desobediencia. Cuenta la leyenda que el emperador romano Claudio, disconforme con el rendimiento militar de sus legiones, había prohibido por decreto el casamiento de los hombres jóvenes con la esperanza de que, libres de ataduras, fuesen más eficientes, aguerridos y arrojados en la batalla.
En secreto, ignorando los decretos imperiales, Valentín, uno de los primeros mártires cristianos, bendecía con el don del matrimonio a los jóvenes enamorados. Enterado, Claudio ordenó encarcelar, torturar y finalmente ejecutar al piadoso sacerdote. Una joven, hija de un oficial romano, curada y convertida por Valentín, conmovida y agradecida por la gracia que había recibido, plantó en la tumba del santo un almendro, árbol que es considerado hasta el día de hoy como un símbolo del amor y la amistad duraderos.
Empapados del espíritu de este día, el restaurante Jacarandá propone para San Valentín y como parte de la nueva carta, un plato alegórico y sensual, pensado para homenajear a todos aquellos tocados por Cupido.
En Del Barco Centenera 383/ 4 432-4994/ www.jacarandaresto.com.ar
Porciones: 2
Tiempo estimado: 40 minutos
Complejidad: alta
Ingredientes:
Para los ñoquis:
- Leche, 1 taza
- Manteca, 1 cucharada
- Harina, 150 gramos
- Espinaca cocida y escurrida, ¾ taza
- Huevos, 3
- Queso rallado, 2 cucharadas
- Sal y pimienta a gusto
Para la salsa:
- Puerro, 1
- Diente de ajo, ½
- Almendras tostadas y peladas, ½ taza
- Almendras fileteadas, 1 cucharada
- Crema de leche, 100 cc
- Leche, 1 taza
- Manteca, 1 cucharada
- Aceite de oliva, 1 cucharada
- Jugo de limón, 1 cucharada
- Sal y pimienta a gusto
Procedimiento:
- Para los ñoquis calentar la leche en una cacerola con una generosa cucharada de manteca y sal. Cuando hierva incorporar toda la harina y mezclar vigorosamente hasta que se forme una masa que se despegue de los bordes. Apagar el fuego, añadir el queso y revolver hasta integrarlo.
- Procesar los huevos con la espinaca, agregar la mezcla a la masa e incorporar ambas preparaciones hasta lograr una masa homogénea. Rellenar una manga con la mezcla y reservar.
- Para la salsa rehogar el ajo y la parte blanca del puerro picados en aceite de oliva y manteca, agregar el vino blanco y cocinar hasta que se evapore el alcohol. Procesar esta preparación junto a las almendras tostadas y la leche. Cocinar 15 minutos y agregar la crema, el jugo de limón y las almendras fileteadas. Cocinar 5 minutos más.
- Cocinar los ñoquis en abundante agua con sal, valiéndose del borde de la olla o de un tenedor para cortar la pasta a medida que sale de la manga.
- Mezclar los ñoquis escurridos en la salsa de almendras y servir.
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