En los últimos años se habla mucho del crecimiento de la cultura del vino, pero en realidad, ¿sabemos de vino? o ¿nos queda mucho que aprender? Es contradictorio, ya que recientes estudios nos indican que la supuesta fama del consumo y moda es falsa. España es el país con menor consumo de vino de Europa, teniendo el mayor viñedo del mundo y siendo el mayor productor. Mientras que en nuestro país se consumen 16 litros de vino per cápita, en Italia, Francia y Portugal se consumen 50-60 litros. Si comparamos el vino con el whisky, es curioso que de este último seamos el segundo consumidor.
Hablando recientemente con productores les comentaba, desde mi punto de vista, la falta de acercamiento de los jóvenes al sector. Piensan que es cosa de mayores, que no es su mundo y sin embargo vemos, como el famoso botellón, está causando terribles problemas en los jóvenes.
Debemos atraer a esta generación, siempre desde el consumo responsable, para que comprueben que este no es un mundo de élite, no hace falta conocer 20 variedades de uva, suelos, tipologías, etc… para saber de vino. Hay que explicar, siempre desde un consumo responsable, los beneficios que rodean al mundo del vino (recientes estudios lo demuestran), gastronomía, amistad, cultura, historia y salud. Hay que acercarse al consumidor y no ponernos exquisitos, en el caso de que pidan un vino con casera y con hielo, no escandalizarnos ya que por ahí se empieza, algún día beberán vinos buenos…
Los últimos estudios del Observatorio Español del Mercado del Vino (OEMV) revelan que para los jóvenes el vino es cosa de mayores, es muy duro de beber, tiene mucho grado alcohólico y las botellas necesitan una herramienta para abrirlas, también declaran que para beber el vino, el envase tendría que ser más pequeño, abrir fácilmente, menos grados y más fruta. Estas serían las bases para dar el paso entre bebidas de moda y vino.
Leyendo estos y otros estudios del mercado del vino ahora entiendo porque se venden 42 millones de botellas de lambrusco.
“Yo sé lo que me gusta y lo que no me gusta “, ¿cuántas veces hemos oído esta frase?, esta es la mejor cata que se puede resumir de un vino. Los temas técnicos los dejamos para los concursos y catas oficiales.
Por eso os animo a que entre amigos siempre haya algo que celebrar con vino, y si es de los nuestros (Arribes o Sierra Salamanca) mejor, seguro que hay una historia detrás de esa botella.
Bienvenido Carrera Gavilán
Fuente: salamancartvaldia.es
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