La tarea tiene una gran dificultad, ya que hay que portar las jarras entre los brazos y que apenas caiga cerveza para depositar todas en la mesa, algo que no logró Struempfel, que derribó dos, pero quedaron suficientes en pie para establecer un nuevo récord.
En total 69 kg de líquido y vidrio que son todo un ejemplo del espectáculo que disfrutarán miles de personas en el Oktoberfest, donde la cerveza es el producto estrella.
No hay comentarios. :
Publicar un comentario