El Quesillo de piña es un postre exquisito, típico de la región oriental venezolana, origen de mi familia paterna.
Mi papá me cuenta que mi abuelita preparaba un quesillo de piña maravilloso, me narra que en su niñez no existía o por lo menos no tenían licuadora, por lo que mi abuelita Carmen extraía el jugo de la piña rallándola con mucha paciencia y cariño, de esta manera obtenía un jugo puro y sabroso.
Actualmente con la ayuda de la licuadora podemos hacer un jugo de piña de manera rápida y sencilla, por lo que preparar este delicioso postre criollo no será difícil.
Se prepara con:
- Un litro de jugo de piña fresca.
- Una docena de huevos.
- Medio kilo de azúcar.
- Una taza de azúcar para acaramelar el molde.
Acaramelamos el molde con la taza de azúcar y tres cucharadas de agua, recordamos agregar un chorrito de jugo de limón para evitar que se cristalice el azúcar.
Mezclamos el jugo de piña con el azúcar y cocinamos hasta que tome punto como un jarabe o sirope de consistencia regular; lo retiramos del fuego y dejamos enfriar.
Los huevos los desleímos, sin batir, los pasamos por un colador metálico y los añadimos al jarabe; una vez bien mezclado todo, le añadimos, si se desea, una cucharada de brandy o ron, y lo vaciamos en el molde que ya está acaramelado.
Lo horneamos en baño maría, por una hora o hasta que al introducirle un palillo, éste salga limpio.
¡Feliz horneado!
Susana Rivas
Maestra Pastelera
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