El pasado domingo 31 de mayo atendí una cordial invitación de almuerzo a un restaurante muy acogedor, en donde comer comida de Autor no significa empeñar el sueldo ni solicitar crédito al Banco, el sitio: El Café del Establo.
LOCALIZACIÓN
El Café del Establo es un restaurante ubicado en las afueras del popular pueblo del Hatillo, en la carretera a La Unión, en los predios del Club Hiparión. El sitio es bien verde en lo que a vegetación se refiere, y cuenta con un área al aire libre y otra bajo techo, ambas agradables. El local posee estacionamiento propio y es de fácil acceso.
EL SITIO
El sitio es bien acogedor, tiene mesas suficientes para un número grande de comensales. El restaurante está atendido por sus propios dueños, los esposos María Josefina y y Jorge Olivier. La atención es buena, realizada mayoritariamente por jóvenes muchachas. La cocina está a cargo de Karen Olivier, hija del los esposos Olivier.
El detalle curioso es que Karen no es chef, Sin embargo su condición no desmejora la calidad de la comida ofrecida.
LA PROPUESTA
La propuesta es bien interesante: Va desde cachapas tradicionales a platos de autor, como los Bollos de plátano rellenos, pasteles de pescado y pastas exóticas. Probé una pasta, Agnolotti relleno con asado negro en salsa de pimentones y ajíes dulces, bien rica. De segunda opción degusté un pastel de pescado llamado pastel de Chucho, el cual estaba muy rico, acompañado de arepitas fritas. Aquí quiero ser honesto: El Chucho es un animal en veda y no es de asequible, por lo que comerlo no es tarea fácil. Ambos platos estuvieron muy bien presentados y por demás deliciosos, entregados en buen tiempo y calienticos. ¿La Bebida? Jugos naturales y guarapo de Papelón con Limón. Para coronar, el postre fue un merengón de Fresas, tan divino que se me olvidó fotografiarlo… prometo en futura publicación reseñarlo
CONCLUSION
La experiencia de degustar comida de autor es a veces muy arriesgada porque supone cierta aventura para probar lo nunca antes comido, y posiblemente el resultado sea lo contrario a lo imaginado, la mayor de la veces para mal. Afortunadamente este no es el caso, Karen se ha arriesgado a innovar y, al menos a mi, me ha gustado la propuesta. La considero recomendable, sin temor alguno. Además, la familia Olivier hace cathering para fiestas y eventos, lo cual es gran aval de lo propuesto en el restaurante así que no tenga miedo a comer exótico y a comenzar a sentirse Gourmet Urbano.
El café del Establo: Carretera La Unión, Club de equitación Hiparión, Sector el otro lado, el Hatillo. Teléfono: 0212 9633255, www.elcafedelestablo.com
No hay comentarios. :
Publicar un comentario