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| El Tom Collins |
La necesidad de un sol que regule nuestro estado de ánimo, estimulando la segregación de las hormonas que nos ayuda a tener ese “guaguancó” típico del venezolano siempre está presente. La nostalgia de tomarnos un delicioso y refrescante cóctel tropical a orillas de nuestro majestuoso Mar Caribe inspira esta entrega que despierta esa introspección típica de la ausencia de ese calor caribeño en la presencia del enebro, las semillas de cilantro, el regaliz, la angélica y el limón. Por supuesto hablamos de uno de los destilados con mayor uso en la coctelería clásica como lo es la Ginebra, la cual acompañaremos con jarabe de goma, zumo de limón recién exprimido y abundante soda para no perder la frescura que nos caracteriza: El Tom Collins
Ingredientes:
- 1 ½ onzas de ginebra Old Tom (en caso de usar otra se llamará John Collins)
- 1 onza de zumo de limón recién exprimido.
- ½ onza de jarabe de goma.
- Soda.
Preparación:
En un vaso tipo Collins (vaso largo) agregar abundante hielo, la ginebra, el limón y el jarabe de goma; mezclar bien con la cuchara de bar y completar con soda, preferiblemente fría.
Como ya es una costumbre, y con la intención de incentivarlos a que se inicien en el mundo de los Collins, queremos presentarles una opción fuera de lo común.
Basil Collins
- 1 ½ onzas de ginebra.
- 1 onza de zumo de limón recién exprimido.
- ½ onza de jarabe de albahaca.
- Soda.
Preparación:
En un vaso tipo Collins (vaso largo) agregar abundante hielo, la ginebra, el limón y el jarabe de albahaca; mezclar bien con la cuchara de bar y completar con soda helada.
Un poco de historia
Este cóctel data del siglo antepasado (principios de 1800, según Fernando Castellón), cuando el jefe de comedor de “The Limmer´s Coffe House” en Londres, el señor John Collins, el cual era adepto a la ginebra, mezcló este maravilloso destilado con azúcar (almíbar), limón y agua con gas (con el tiempo se modificó a soda). John, quien era fanático de la marca Old Tom, lo bautizó Tom Collins.
Así nace este clásico de la coctelería, el nombre del vaso y a su vez una familia de cócteles. Se considera un “Collins” a todo cóctel que lleve en su preparación un destilado, un jarabe de goma o almíbar, zumo de limón y abundante soda. A partir de allí no queda más usar la imaginación para viajar por el infinito mundo del Collins.
Con este refrescante Collins contrarrestamos estos 10 grados centígrados merideños y nos despedimos hasta la semana que viene.
¡Salud!
TNTCocktails
Hacemos del cocktail una Experiencia
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