En la búsqueda de recrearnos con y en nuestros sentidos, buscando placer, belleza y glamour no podemos olvidar lo que en el momento actual está en pleno apogeo , el vino y sus derivados.
Una sociedad hedonista comienza a entender y buscar un nuevo camino, entiende las uvas y su complejidad en determinado terroir y echa mano de estos conocimientos y la diversificación del sector, hemos topado de lleno con la vinoterapia.
Armonía, bienestar y relajación por medio de manos expertas es lo que se nos ofrece en zonas vitivinícolas o ambientes urbanos que intentan condesar en espacios y productos un gran abanico de sensaciones. Sucumbir al placer del vino más allá de haber saboreado una copa, buscar tratamientos que nos ayuden a buscar placer, reencontrarnos con la calma y tratamos de olvidar el estrés de la vida cotidiana.
A todo este descubrimiento nos conduce la búsqueda de la eterna juventud. Si lo de Cleopatra fueron baños de leche, los nuestros serán de vino. Ya los romanos se bañaban en un vino espumoso y burbujeante que llamaban “Vinum Titilum” y que actualmente conocemos como Champagne.
La vinoterapia ha pasado a formar parte de modas y costumbres. Prisas y estrés nos hacen envejecer interior y exteriormente y es por ello que buscamos alternativas a las inyecciones y bisturís,………lo que nos lleva a tratamientos con materias primas naturales , en este caso: uvas, el vino y su entorno.
Se trata de una terapia importada del país vecino, en concreto de la zona de Burdeos y en la actualidad en España , zonas rurales y grandes urbes , hacen uso de estos tratamientos, así como líneas cosméticas cuya materia prima gira en torno al vino. Podemos hablar incluso de la existencia de lugares que ofertan masovinoterapia, masajes con cremas y aceites de vinos, impartidos por fisioterapeutas y complementados con una copa de vino.
Todo vale con un tratamiento, purificación y procesado adecuado: orujos, extractos de uvas, levaduras, fangos de vino, pepitas (enteras o sus aceites), flores, hojas de vid, mosto de vino tinto y en ocasiones blanco, pulpa, sarmiento,…. para la obtención de: vitaminas, colorantes, polifenoles, aceites esenciales, etc.
Hemos descubierto una nueva cura anti edad en forma de leches limpiadoras, lociones tonificantes, fluidos hidratantes, cremas antiarrugas, reafirmantes de senos y glúteos
(¡ dichosa gravedad!), leches corporales, geles reductores y anticelulíticos, geles espumosos de ducha, geles exfoliantes o peelings y una pequeña línea de hombre basada en lociones postafeitado, más limitada por la naturaleza seca de la piel del varón tan castigada por los tratamientos de afeitados y las características astringentes de las pepitas de las uvas. Puestos a diferenciar en castas digamos que para hombre seria más recomendable la tempranillo y para mujer el albariño y verdejo; si lo diferenciamos en una copa porque no en nuestra piel. Hay que tener en cuenta que las variedades tintas serán más antioxidantes.
Una gran variedad de tratamientos:
- - Baños y duchas,baños de polifenoles, piscinas, saunas, baños de vapor, jacuzzi, ducha en tonel. Baños antienvejecimiento y circulatorios a base de vid roja, uvas tintas, sobre todo cabernet sauvignon, tempranillo, merlot.
- - Masajes . Si la mujer es como una fruta que exhala su fragancia al ser frotada con las manos (“El Jardín Perfumado”), unas manos mágicas sobre nuestra nuca y cara nos harán liberar tensiones y sentirnos bien.
- o Hidromasajes
- o Masajes de aceites esenciales de pepitas de uvas de vid roja que nos harán recobrar vitalidad, energía y purificarnos.
- o Tratamientos de drenaje linfático
- o Exfoliaciones para tratar de recobrar un aspecto satinado y embellecer nuestra piel con aceites esenciales de pepitas de uvas
- - Mármoles calientes
- - Purificación y aclaramiento de manchas de la piel bien con bentonita (arcilla utilizada como clarificante en la elaboración del vino) o con uvas como la cabernet sauvignon y baños de cava.
- - Tratamientos de piernas pesadas y vasodilatación con hojas de vid
- - Reducción de abdomen
- - Tratamientos de renovación celular para mejorar y recuperar la piel protegiendo las fibras de colágeno y elastina, prevenir la destrucción de los ácidos constituyentes de los tejidos y dar firmeza a la piel. Rejuvenecimiento de músculos y piel.
Si lo que queremos es hacer trabajar a nuestra nariz habrá que recurrir a la Aromaterapia con tratamientos con aceites esenciales: flor de viña, extractos uvas tintas, fangos, micronizados de uvas,…. Y si lo terminamos con una copa de vino nos encontraremos con una perfecta armonía, regeneración por fuera y un alegría por dentro.
Todos los beneficios residen básicamente en las uvas tintas y en la riqueza en
polifenoles, fuente de juventud, grandes luchadores contra el envejecimiento prematuro y sus causantes: los anti radicales libres originados por la contaminación, el estrés y la mala alimentación. Glucósido con acción sobre el corazón, astringentes y tónicas, así como el
Resveratrol de efecto lifting y que podemos encontrarnos en sarmientos y escobajos que además de antioxidantes y antienvejecimiento será restaurador del colágeno, tonificación, resplandor, reafirmación y aumento de la elasticidad.
Buscamos un equilibrio sensorial basado en el uso de uvas, vinos y sus derivados. Quizás ahora el vino nos sepa aún mejor.
Autor: Mercedes González
Fuente:
elcatavinos.com
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