Y lo hicimos con un vino elaborado con una variedad muy particular, la Gewürztraminer, pero que procede, en lugar de Francia, Austria o Alemania, de Chile: el Aresti A
Las flores y especias de este vino blanco y su acidez moderada acompañan muy bien la untuosidad de la tarta, en particular de su relleno, creando un descanso de la condición dulce del postre con lo que se puede comer más sin sentirse empalagado.
Una combinación para seguir explorando la relación entre vino y comida.
¡Salud y buen apetito!
Fernando Franz
Chef
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