El Gourmet Urbano: Comer emocionalmente: Sentir culpa con los alimentos que consumimos

lunes, 17 de febrero de 2014

Comer emocionalmente: Sentir culpa con los alimentos que consumimos

Deje de etiquetar los alimentos como buenos o malos, ya que puede desencadenar un círculo vicioso de comer emocionalmente y luego sentir vergüenza. Nuestra relación con la comida puede ser complicada y someternos a juicios de valor, como el bien y el mal que en realidad puede sabotear sus intentos de alimentación saludable.

 

Sentir culpa con los alimentos que consumimos

 

Si usted quiere perder peso – o simplemente mantener su peso actual – es el momento de redefinir cómo ve la comida.

 

En primer lugar, debemos evaluar cómo se siente acerca de sus hábitos alimenticios. Hágase las siguientes preguntas:

  • ¿Se siente culpable cuando usted come un postre de chocolate, o con crema? ¿Consideras que con algunos alimentos en particular eres demasiado indulgente?
  • ¿Tienes tendencia a etiquetar los alimentos como buenos o malos? ¿También etiquetas tu conducta alimentaria como buena o mala?
  • ¿A veces dices que te mereces o has ganado un alimento que normalmente se considera fuera de los límites?
  • ¿Te juzga a tí mismo después de comer dulces o alimentos de la comodidad o los bocadillos por razones emocionales?

 

Si has contestado a alguna de estas preguntas, significa que estas muy familiarizada con la culpa al comer alimentos. Una gran cantidad de mujeres aumentaron de peso por sentirse culpable con la comida.

 

Pensar que un alimento es  bueno o malo le ayudará a consumir menos alimentos, según una nueva investigación de los Países Bajos. De hecho, la única cosa que las mujeres que se obsesionan sobre lo que debe o no debe comer consiguen son más sentimientos de culpa.

 

El problema es que si nos reprimimos, nos reprendemos a nosotros mismos o nos sentimos avergonzadas por nuestras selecciones de alimentos eso mismo nos hará caer en la tentación.

 

Algunas mujeres dejarán incluso de salir con los amigos a fin de evitar la culpa de los alimentos. Estos sentimientos pueden desencadenar un círculo vicioso: la culpa lleva a comer en exceso que conduce a la culpa y así sucesivamente.

 

Qué hacer para no sentir culpa con los alimentos:

 

Aprender un segundo idioma: deja de decirte a ti mismo que eres una persona buena o mala, o que eres mala o negligente sobre la base de lo que se come. Es saludable reconocer que es posible que haya comido en exceso y tratar de averiguar que fue la causa de haberlo hecho,  si se trataba de estrés, frustración o tristeza – en vez de girar de nuevo a la comida como una forma de lidiar con el exceso de comida !

 

Quita las etiquetas: No hay tal cosa como una comida inherentemente buena mala. La comida no está mal si no es tóxica, venenosa, o en mal, así que olvide la costumbre de etiquetado. Todos los alimentos tienen su lugar en una dieta saludable, siempre y cuando se comen en la moderación y en sus porciones. Es una cuestión de cambiar su forma de pensar, dice Laburos.

Busque un balance: Tenemos docenas de decisiones sobre la comida todos los días si nos exudemos, entonces tomar decisiones más saludables en la próxima comida.

 

Fuente: Nutricion.pro

 

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