Por lo general, muchas de estas latas en conservas suelen venir con un sistema de abre fácil que consiste en una pequeña argolla de metal o una pequeña pestaña que sobresale de la tapa y que están preparadas para tirar de ellas y así abrir la lata y acceder a su interior. Sin embargo, hay ocasiones en la que al tirar rompemos la argolla o la pestaña del abre fácil sin querer al tirar con mucha fuerza, o incluso hay ocasiones en las que algunas latas no tienen este sistema de abre fácil, por lo que debemos usar un abridor o abre latas. Pero claro hay veces en la que no tenemos uno a mano y nos vemos en la obligación de usar nuestra imaginación para conseguir abrir la lata.
Uno de los trucos infalibles para poder abrir una lata sin ayuda del abrelatas es utilizando una piedra. ¿Qué cómo hacerlo? Es muy fácil. Solo es necesario encontrar una piedra con unas condiciones concretas, como por ejemplo que debe ser una piedra lisa que nos ayude a perforar y limar la superficie de la lata con facilidad para poder abrirla, algo que no se conseguirá con una piedra lisa.
Una vez que tengamos la piedra que sea áspera, debemos dar la vuelta a la lata y colocarla contra la propia piedra para así conseguir romper el sello de la parte superior. Cuando la tengamos colocada, comenzamos a frotar la lata contra la piedra desde detrás hacia adelante. Lo mejor es hacerlo en formas circulares ya que así crearemos una fricción mayor. Durante el proceso debemos vigilar la lata y darle la vuelta de forma continua para examinar cómo va el proceso.
Debemos continuar este proceso hasta que notemos un poco de humedad en la piedra o en la propia lata ya que esto querrá decir que hemos limado lo suficiente como para hacer que la tapa sea mucho más fina y accesible y que podemos comenzar a abrirla. No debemos continuar cuando lleguemos a este punto ya que si rompemos demasiado la tapa y la limamos demasiado la comida puede derramarse.
Fuente: Femenino.info
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