La guía que necesitas para introducirte al mundo de la vitivinicultura.
La próxima ocasión que tengas que elegir un vino podrás tener mayor conocimiento sobre cómo hacerlo. En esta guía, que hemos preparado junto con la sommelier Sandra Fernández, te damos información indispensable para que te adentres a este mundo.
Introducirse. Perfila tu gusto
La mejor manera de empezar a conocer el mundo del vino es perfilando nuestro gusto.
Empieza por comprar vinos más o menos del mismo costo, sea cual sea tu presupuesto. Es importante que sean de uvas diferentes, entonces pruebas uvas tintas (Malbec, Merlot, Shiraz, Cabernet sauvignon y más) y uvas blancas (Chardonnay, Sauvignon blanc, Chenin Blanc, Pinot Grigio y más), así identificas los sabores y aromas que te van gustando más.
Esto es un tema muy básico, porque la uva acorde a la región tendrá sabores distintos. Puede que no te guste un tipo de uva de una región, pero la misma uva de otra región te podrá encantar. Por ello compra vinos de diferentes uvas y de diversos países; una vez que más o menos tengas perfilado tu gusto vas a poder hacer una mejor elección de compra cuando vayas a adquirir vino al supermercado y sabrás tus gustos, es una manera de empezar a aprender de vinos.
Se divide en 3 pilares
Por otra parte, existen uvas:
Importante: la intensidad de la uva no define si son buenos o malos vinos, simplemente marca el estilo diferente.
Si bien es cierto que las carnes rojas siempre van a ir mejor con vinos tintos que con blancos, es un hecho real y lo tenemos que seguir contemplando como algo lógico, sin embargo, con la evolución que ha habido en la gastronomía hoy en día nos hemos movido y hemos podido encontrar la accesibilidad a muchos productos vinícolas con diferente estructura y estilo.
Básate en cuál es tu elemento para maridar: la intensidad del platillo, el tipo de proteína, el tipo de cocción, si deseas hacer un contraste o complemento.
Recuerda, la cantidad de proteína que veas en tu plato marca qué tipo de vino debes de usar para maridar. Entre más proteína animal haya en un plato, más intensidad y estructura se necesita en el vino, de otra manera, el vino quedaría más corto que el platillo; por el contrario, si tienes un plato suave con carne blanca o proteínas sin mucha grasa, debes buscar un vino no muy robusto como un rosado o blanco, pues debe de haber una lógica de intensidades.
Por ejemplo un maridaje de contraste serían cosas dulces o saladas con un vino que logre contrarrestarlo como queso roquefort con Oporta, este maridaje logra una combinación explosiva.
Un maridaje de complemento puede ser una pasta con base de crema acompañada de un vino Chardonnay, logra una analogía de intensidades.
Un maridaje universal –que se puede combinar casi con todo– te lo proporcionan los vinos espumosos secos, excepto con cortes de carne muy grasos o estofados de muy lenta cocción en horno.
En cuanto a vinos dulces debes de saber muy bien cómo jugar con ellos, pueden ser un postre en sí mismo o generalmente combinan muy bien con frutas frescas, postres donde haya fruta, compotas o con tablas de queso.
Esto no significa que bueno o mala calidad, sino otros temas como cuestiones ecológicas, de conservación, de accesibilidad, de target, Ya sea corcho o taparrosca, todo es válido.
El corcho de alcornoque permite una mínima microoxigenación del vino, lo cual es bueno siempre y cuando no te pases del tiempo. Mientras que el corcho de taparrosca te permite conservar el producto tal cual el enólogo lo puso en esa botella de vino.
Tetrapack
Existen vinos en tetrapack de buena calidad. En la actualidad es la manera de muchas familias de beber vino. Este empaque permite bajar costos. Cabe mencionar que “la mayor cantidad de vino que se bebe en el mundo es en este formato”, nos aseguró la sommelier.
Una vez abierto
La vida de un vino es de 3 días máximo una vez abierto, después de 3 días el vino pierde propiedades, te recomendamos taparlo bien y no guardarlo por más de 6 días.
Depende del vino se debe de hace la decantación, esta se hace por tres razones 1) filtrar los sedimentos de un vino viejo, 2) oxigenar un vino joven, que necesita oxígeno para sacar sus propiedades y 3) por temperatura, si enfriaste mucho un vino, lo decantas y esperas a degustarlo en la temperatura ideal.
Dato: los vinos de bajo costo no te van a dar más, la decantación se recomienda en vinos premium, pues la oxigenación va a permitir que las moléculas aromáticas del vino sean más expresivas.
Si vas tienes presupuesto para comprar una botella arriba de 500 pesos te recomendamos que no la compres en el supermercado, porque necesariamente no está bien cuidada, es mejor adquirirla en una tienda especializada en vinos, por ejemplo, en la Ciudad de México puede ser en Acento, Catamundi, La Europea, La castellana, La naval, Vinoteca y, posiblemente, City Market; en Monterrey en Vinoteca, y Guadalajara en Cava Luna, no son las únicas existen mucho más.
Ambas permitidas, pero es mejor beberlo en copas de cristal para poder degustarlo en plenitud, son una herramienta básica.
Para algo más informal se podría beber en vasos para vino, pero no son muy convenientes, pues al estar en contacto con la temperatura corporal el vino se calienta. Si es un vino más sencillo no pasa nada beberlo de esta manera.
Relación precio-calidad
Sí importa, pero sobre todo debe ser congruente entre el contenido y lo que estás pagando por una botella de vino; el precio debe de ser justo y adecuado.
“Un vino que tiene calidad es un vino congruente, entre el precio, el look y el contenido”, asegura Sandra.
Foto: iStock
La mejor manera de empezar a conocer el mundo del vino es perfilando nuestro gusto.
Empieza por comprar vinos más o menos del mismo costo, sea cual sea tu presupuesto. Es importante que sean de uvas diferentes, entonces pruebas uvas tintas (Malbec, Merlot, Shiraz, Cabernet sauvignon y más) y uvas blancas (Chardonnay, Sauvignon blanc, Chenin Blanc, Pinot Grigio y más), así identificas los sabores y aromas que te van gustando más.
Esto es un tema muy básico, porque la uva acorde a la región tendrá sabores distintos. Puede que no te guste un tipo de uva de una región, pero la misma uva de otra región te podrá encantar. Por ello compra vinos de diferentes uvas y de diversos países; una vez que más o menos tengas perfilado tu gusto vas a poder hacer una mejor elección de compra cuando vayas a adquirir vino al supermercado y sabrás tus gustos, es una manera de empezar a aprender de vinos.
Foto: iStock
Características de la uva
Se divide en 3 pilares
- Tipo: el perfil de la uva es único y tiene un distintivo acorde a las cepas existentes, en resumen es como la personalidad con la que cada uno nace.
- Origen: región donde se cultiva. Si el clima es más cálido o más frío cambia mucho la personalidad de la uva.
- Vinificación: la decisión de cómo se va a elaborar o vinificar para convertirla en vino.
Por otra parte, existen uvas:
- Tintas
- Intensas, altas en taninos, es decir de alta astringencia: Cabernet sauvignon, Nebbiolo, Tannat y Syrah.
- Medias: Malbec y Grenache
- Débiles: Pinot noir, Sangiovese y Gamay.
- Blancas
- Intensas: Chardonnay y Vigné
- Medias: Pinot grigio, Albariño y Verdejo
- Suaves: Sauvignon blanc y Grüner Veltliner
Importante: la intensidad de la uva no define si son buenos o malos vinos, simplemente marca el estilo diferente.
Foto: iStock
Maridaje
Si bien es cierto que las carnes rojas siempre van a ir mejor con vinos tintos que con blancos, es un hecho real y lo tenemos que seguir contemplando como algo lógico, sin embargo, con la evolución que ha habido en la gastronomía hoy en día nos hemos movido y hemos podido encontrar la accesibilidad a muchos productos vinícolas con diferente estructura y estilo.
Básate en cuál es tu elemento para maridar: la intensidad del platillo, el tipo de proteína, el tipo de cocción, si deseas hacer un contraste o complemento.
Recuerda, la cantidad de proteína que veas en tu plato marca qué tipo de vino debes de usar para maridar. Entre más proteína animal haya en un plato, más intensidad y estructura se necesita en el vino, de otra manera, el vino quedaría más corto que el platillo; por el contrario, si tienes un plato suave con carne blanca o proteínas sin mucha grasa, debes buscar un vino no muy robusto como un rosado o blanco, pues debe de haber una lógica de intensidades.
Por ejemplo un maridaje de contraste serían cosas dulces o saladas con un vino que logre contrarrestarlo como queso roquefort con Oporta, este maridaje logra una combinación explosiva.
Un maridaje de complemento puede ser una pasta con base de crema acompañada de un vino Chardonnay, logra una analogía de intensidades.
Un maridaje universal –que se puede combinar casi con todo– te lo proporcionan los vinos espumosos secos, excepto con cortes de carne muy grasos o estofados de muy lenta cocción en horno.
En cuanto a vinos dulces debes de saber muy bien cómo jugar con ellos, pueden ser un postre en sí mismo o generalmente combinan muy bien con frutas frescas, postres donde haya fruta, compotas o con tablas de queso.
Foto: iStock
Temperatura
- Blancos y espumosos entre 5-7 grados
- Rosados entre 8-10 grados
- Tintos jóvenes 14 grados
- Tintos maduros 17 grados
- Corcho o taparrosca
Esto no significa que bueno o mala calidad, sino otros temas como cuestiones ecológicas, de conservación, de accesibilidad, de target, Ya sea corcho o taparrosca, todo es válido.
El corcho de alcornoque permite una mínima microoxigenación del vino, lo cual es bueno siempre y cuando no te pases del tiempo. Mientras que el corcho de taparrosca te permite conservar el producto tal cual el enólogo lo puso en esa botella de vino.
Tetrapack
Existen vinos en tetrapack de buena calidad. En la actualidad es la manera de muchas familias de beber vino. Este empaque permite bajar costos. Cabe mencionar que “la mayor cantidad de vino que se bebe en el mundo es en este formato”, nos aseguró la sommelier.
Una vez abierto
La vida de un vino es de 3 días máximo una vez abierto, después de 3 días el vino pierde propiedades, te recomendamos taparlo bien y no guardarlo por más de 6 días.
Foto: iStock
Decantación
Depende del vino se debe de hace la decantación, esta se hace por tres razones 1) filtrar los sedimentos de un vino viejo, 2) oxigenar un vino joven, que necesita oxígeno para sacar sus propiedades y 3) por temperatura, si enfriaste mucho un vino, lo decantas y esperas a degustarlo en la temperatura ideal.
Dato: los vinos de bajo costo no te van a dar más, la decantación se recomienda en vinos premium, pues la oxigenación va a permitir que las moléculas aromáticas del vino sean más expresivas.
¿Dónde comprar?
Si vas tienes presupuesto para comprar una botella arriba de 500 pesos te recomendamos que no la compres en el supermercado, porque necesariamente no está bien cuidada, es mejor adquirirla en una tienda especializada en vinos, por ejemplo, en la Ciudad de México puede ser en Acento, Catamundi, La Europea, La castellana, La naval, Vinoteca y, posiblemente, City Market; en Monterrey en Vinoteca, y Guadalajara en Cava Luna, no son las únicas existen mucho más.
Copa o vaso
Ambas permitidas, pero es mejor beberlo en copas de cristal para poder degustarlo en plenitud, son una herramienta básica.
Para algo más informal se podría beber en vasos para vino, pero no son muy convenientes, pues al estar en contacto con la temperatura corporal el vino se calienta. Si es un vino más sencillo no pasa nada beberlo de esta manera.
Relación precio-calidad
Sí importa, pero sobre todo debe ser congruente entre el contenido y lo que estás pagando por una botella de vino; el precio debe de ser justo y adecuado.
“Un vino que tiene calidad es un vino congruente, entre el precio, el look y el contenido”, asegura Sandra.
Foto: iStock
Para finalizar Sandra nos confesó su top 5 por región
Sandra Fernández Gaytán es una de las mejores sommeliers mexicanas, creadora del vino 3V de Casa Madero, su especialidad no sólo se centra en el vino, sino que también en el mezcal, ginebra, tequila, whisky y café.
Cuenta con los siguientes grados de certificación: Certified Wine Educator, Certified Specialist in Wine, Certified Specialist in Spirits obtenidos en The Society of Wine Educators.
- Borgoña
- Napa
- Burdeos
- Pie Monte
- Champagne
Sandra Fernández Gaytán es una de las mejores sommeliers mexicanas, creadora del vino 3V de Casa Madero, su especialidad no sólo se centra en el vino, sino que también en el mezcal, ginebra, tequila, whisky y café.
Cuenta con los siguientes grados de certificación: Certified Wine Educator, Certified Specialist in Wine, Certified Specialist in Spirits obtenidos en The Society of Wine Educators.
Fuente: GQ
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