El escurridor de platos puede guardar sarro. Foto: iStock / Foto Ilustrativa |
El escurridor de los trates es una estructura que también requiere de una limpieza constante para evitar sarro o bacterias
El escurridor de trastes de la cocina es uno de los artefactos de más uso y es que como su nombre lo indica, es la estructura en donde se colocan todos los platos, vasos y cubiertos después de que son lavados y aquí se reservan por unos minutos mientras se escurre el exceso de agua. Por esta misma razón, es uno de los lugares más propensos a generar sarro o hasta manchas que pueden convertirse en hongos.
Esta estructura suele estar fabricada de acero inoxidable o plástico, por lo que no resulta tan fácil limpiar con los productos químicos tradicionales que prometen arrancar grasa y dejar cada superficie con una apariencia renovada, sino más bien se tiene que someter a una rutina de limpieza totalmente eficaz que permita evitar la acumulación de suciedad.
Con el siguiente paso a paso tendrás esa rutina de limpieza que necesitas para poder eliminar el sarro del escurridor y quitar hasta la humedad acumulada que estimula el crecimiento de gérmenes o bacterias. Verás que con esta solución casera podrás dejarlo como nuevo y más limpio que nunca para que siga cumpliendo con esta función después de lavar los trastes.
Así puedes quitar el sarro del escurridor de los trastes
Verás que esta rutina de limpieza lleva un truco infalible para quitar el sarro del escurridor de los trastes además podrás ir desapareciendo esas manchas que abren paso a la humedad y bacterias. Consigue estos ingredientes para lograrlo.
Ingredientes
- 1 ? taza de bicarbonato de sodio
- ½ taza de jabón líquido
- 2 cdas de vinagre blanco
- ½ taza de agua
Procedimiento
Primero lo que debes de realizar es quitar todos los trastes de la estructura y limpiarla superficialmente con un trapo de cocina limpio. Ahora mezcla todos los ingredientes en una bandeja y aplica con ayuda de un cepillo de dientes que ya no se utilice o esponja sobre esas manchas o sarro acumulado, deja actuar por al menos 15 minutos.
Una vez pasado este tiempo, talla con un estropajo de cocina o el cepillo de dientes, realiza círculos y pon suma atención en aquellas partes donde requiera de una limpieza profunda. Limpia cada barrote a la perfección.
Retira con un trapo limpio y ahora talla con un poco de jabón liquido y enjuaga con agua. Seca muy bien y verifica que las partes dañadas por el sarro hayan desaparecido, sino es así vuelve a repetir la rutina para que poco a poco recobre su apariencia.
Es una rutina de limpieza que puedes repetir dos veces a la semana hasta el punto de que el escurridor de trastes mantenga una apariencia intacta y el sarro así como suciedad (que puede generar hongos) ya no esté presente. Ahora es momento de ponerlo a prueba y dejarlo como nuevo, recuerda que es una estructura que también necesita una limpieza constante, después de todo ahí se colocan los platos o vajilla en general en la que se degusta la comida.
Daniela Hernández
Fuente: Gastrolab
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