Para la mousse
- 200 g de chocolate blanco
- 100 g de azúcar
- 500 g de nata líquida o crema de leche
- 3 yemas de huevo
- 1 cucharada de gelatina sin sabor
Para el jengibre confitado
- 350 g de azúcar
- 500 g de jengibre
- Para la ganache144 g de chocolate de leche
- 650 g de chocolate semi amargo
- 356 g de mantequilla
- 266 g de nata o crema de leche
Elaboración paso a paso
- Comencemos con la mousse. Calienta la mitad de la crema de leche o nata líquida y vierte las sobre el chocolate blanco cortado en cubos pequeños. Remueve cuidadosamente con una cuchara de madera hasta que se funda.
- Coloca el azúcar en una olla y cubre con agua. Lleva a fuego y realiza una almíbar.
- Bate las yemas con la batidora eléctrica e incorpora el almíbar lentamente hasta obtener un tono blancuzco o amarillo pálido.
- Añade las yemas batidas a la mezcla de chocolate blanco y reserva.
- Bate la nata líquida o crema de leche y cuando este firme, mezcla con la preparación anterior.
- Agrega la gelatina sin sabor previamente disuelta en agua y mezcla muy bien.
- Para hacer el jengibre confitado, deberás pelar el jengibre y cortarlo en rodajas finas. Cubre con agua y hierve a fuego lento durante 30 minutos.
- Escurre e incorpora el azúcar y tres cucharadas de agua. Cocina sin dejar de revolver hasta que se vuelva translúcido y casi todo el líquido se haya evaporado. Ahora disminuye la temperatura y sigue cocinando hasta que esté seco. Deja enfriar antes de usar.
- Para hacer la ganache corta el chocolate semiamargo en cubos pequeños al igual que el chocolate de leche y fúndelos en una olla baño María o en el microondas.
- Hierve la crema y al retirar, incorpora los chocolates y la mantequilla fundida. Revuelve con una cuchara hasta que quede suave.
- Vierte ahora la mousse de chocolate blanco en copas y deja enfriar en la nevera durante 60 minutos. Sirve con el jengibre confitado y la ganache.
Fuente: Placer al Plato
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