La buena selección de las materia primas para su uso en la panadería tiene una vital importancia.
Y es ese gran mercado de potenciales clientes el que sustenta un negocio híper competitivo, con muchas pymes que también elaboran sus propios panes para una clientela más específica.
A nivel país, los tres panes más consumidos son “la marraqueta, la hallulla y el pan amasado”, revela Joel Solorza, director de la Escuela de Gastronomía de la Universidad de Las Américas.
Pero ya sea a nivel más industrial o más artesanal, la buena selección de las materia primas para su uso en la panadería tiene una vital importancia.
“El panadero debe estar atento al tipo de producto que adquiere, conocer su procedencia y sus características. Y, por supuesto, su fecha de caducidad”, apunta el docente.
Insumos para la panadería
De acuerdo a lo indicado por el académico, entre los insumos básicos con que debería contar una panadería se cuentan la harina de trigo, “que es la base para la mayoría de los productos de panadería”, así como la levadura, “que ayuda a que la masa fermente y le da esponjosidad al pan”.
Además hay que contar con azúcar, que se emplea como edulcorante en muchos productos de panadería así como la sal, que se incorpora también en productos dulces.
“El agua es esencial en la preparación de la masa y otros productos, mientras que la mantequilla o la margarina se utilizan para dar sabor, textura y humedad a los productos de panadería”, revela el docente.
Por su parte, la leche se usa en muchos productos de panadería para dar sabor y enriquecer la masa, en tanto que los huevos se emplean “para agregar sabor, color y textura a los productos de panadería”.
Respecto de qué productos debería tener a la venta una panadería, Solorza indica que, además de diversos tipos de pan, “como blanco, integral, baguettes, pan de molde, etcétera”, también puede ofrecer pasteles y tortas.
A eso puede además sumar muffins, galletas, croissants y postres.
Fuente: La Cuarta
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