Cerró 2012 con una suba del 12,8% en volumen y del 6% en facturación en sus exportaciones. Graneles y mosto salvan al fraccionado.
La pobre performance del vino fraccionario no es sólo un problema de la Argentina. Chile también lo sufre como consecuencia de la crisis internacional y la caída del consumo de las economías más desarrolladas como Europa y Estados Unidos.
En todo el 2012, las exportaciones de vino a granel de Chile crecieron 38,3% en volumen y el 34,5% en facturación.
Los datos de 2012 muestran esta tendencia en la que mostos y vino a granel logran compensar la pobre performance de las exportaciones de vinos fraccionados.
Chile cerró 2012 con exportaciones totales de productos vitivinícolas por 753 millones de litros a un valor consolidado de U$S1.804,9 millones, lo que marca un crecimiento en relación al 2011 del 12,8% en volumen y del 6% en facturación, según datos del Observatorio Vitivinícolas de Mendoza.
Hacia el interior de las estadísticas, los datos indican que mientras las exportaciones de vino a granel crecieron 38,3% en volumen y el 34,5% en facturación y la de mostos aumentaron 23,4% en volumen y el 40,5% en facturación, el vino fraccionado creció sólo 1,3% en cantidad exportada y el 1,2% en dólares. La particularidad es que el casi mínimo crecimiento en las exportaciones de vino fraccionado de Chile se dio en un año en el que los precios promedio se mantuvieron estables, con una evolución entre 2011 y el 2012 del -0,1%.
Las razones de esta pobre performance del vino fraccionado chileno están en la crisis que viven dos de sus mercados clave: Reino Unido y Estados Unidos. Las exportaciones de vinos fraccionados chileno a Reino Unido cayeron 6,1% en volumen y el 4,1% en facturación; mientras que las ventas a Estados Unidos bajaron 8,6% en litros y el 7,9% en dólares.
Las exportaciones de vinos embotellados mantuvieron un nivel bastante parecido al del año 2011, consiguiéndose un avance apenas superior a 1%, tanto en volumen como en valor. Este comportamiento no permitió alcanzar la meta planteada para este año en el Plan 2020, postulado por la industria vitivinícola chilena, la que se estimaba en U$S1.484 millones en exportaciones de vinos fraccionados con denominación de origen. Respecto de dicha meta hubo una diferencia de 146 millones de dólares, equivalente a 9,9% del valor proyectado.
En el año 2012 se presentaron algunas situaciones de la economía internacional que afectaron la evolución de las exportaciones de vinos embotellados chilenos, en particular a los mercados de la Unión Europea y de Norteamérica, apreciándose importantes caídas en los envíos al Reino Unido y Estados Unidos, que son los dos principales destinos de estas exportaciones.
Debido a una esperada recuperación de estas economías durante 2013 y a un posible desarrollo más agresivo de los mercados asiáticos, principalmente China, Japón y Corea del Sur, las expectativas para el año que está comenzando se vislumbran más auspiciosas para esta categoría, lo que posiblemente permitirá conseguir la meta de exportaciones estimada para este año, que es de U$S1.620 millones.
Un hecho que destaca el informe de la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias de Chile (Odepa) es el incremento de las exportaciones de vinos a granel registrado durante el último año. El volumen de esta categoría aumentó 38,3%, llegando a 290,7 millones de litros, en tanto que su valor subió 34,5%, alcanzando U$S330 millones. Los principales mercados para las exportaciones chilenas de vinos a granel en 2012 fueron Estados Unidos (29,4%), China (18,1%), Alemania (8,3%), Reino Unido (7,3%), España (7,3%), Dinamarca (4,8%), Japón (4,4%) y Suecia (3,8%).
Fuente: mdzol.com
No hay comentarios. :
Publicar un comentario