La cocina del Milenio dejó su impronta en la segunda jornada del concurso de gastronomía de Almería
Un tajine de cordero con aroma a hierbabuena fue el plato que se impuso en el día martes 26 en la segunda jornada del Concurso de Gastronomía Almeriense, que nuevamente contó con seis participantes que se disputaron un primer puesto que estuvo más reñido que el día anterior.
El cordero es una carne difícil de cocinar, pero Manuel Jorge García, lo guisó como había que hacerlo, y más en el año en el que se está conmemorando el milenio, que estuvo bien representado ayer a través de dos de los ingredientes que se propusieron por parte del jurado del concurso: la canela y esta carne.
A partir de las once de la mañana comenzaron a bullir los seis fogones, cuyos dueños improvisados trataron de luchar por un puesto de privilegio en los paladares de un jurado que lo tenían más claro que nunca: el cordero no debe rejumbrear. Verbo almeriense que hace énfasis en que el sabor de esta carne con personalidad no destacase por encima de la composición que se pretende cada vez que se dispone un guiso de este tipo. «Por ello mucha gente elige cocinar el lechal, es decir, el cordero más joven, para intentar salvar así la fuerza torrencial que esta carne representa», explicó José María Garrido, profesor de la escuela de hostelería almeriense.
El plato ganador fue un guiso de cordero con hierbabuena que evocó al pasado árabe almeriense
A las 14 horas comenzó la cata, que no decepcionó, a diferencia de como así lo hizo el día anterior, donde el reto de preparar gachas con caldo quemado estuvo lejos de presentar aquello que el jurado pidió. No fue así en el día de ayer, donde los guisos más celebrados fueron aquellos que rezumaron el aroma milenario de los árabes. Ese que rememoraba a un pasado donde el cordero se aromatizaba de tal manera que cualquiera entendía su peculiar y fuerte sabor como un todo en el que sin duda la ligazón manda.
Como ocurrió en el plato de Manuel García, quien dio un toque maestro a base de hierbabuena a un guiso de cordero que presentó, para gloria de todos, en un tajine. Ese utensilio de barro que además de bonito es perfecto para preservar el calor del plato. De manufactura árabe, el chaval acertó presentando de tal manera su confección que el jurado premió con gusto, el mismo que derrochaba su cordero.
Además de su galardón, también hubo en el día de ayer un accésit adicional a las mejores torrijas, que en este caso fueron para Avelina Alcaraz Navarro, hija de una de las concursantes con mayor tradición en este certamen que en el día de hoy se celebra su última jornada, donde a partir de las 11.30 horas Juan Manuel Sánchez, primer masterchef de España, deleitará a los presentes con su arte.
Fuente: ideal.es
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