Cada año, con la llegada de la Navidad, se desata una incontenible fiebre consumista que alcanza también, como no podía ser menos, al mundo de la gastronomía. En lo culinario, estas fiestas representan el punto álgido del exceso puro y duro: entre comidas, copas y cócteles de empresa, y las sucesivas celebraciones familiares y entre amigos en la que parece ser la única época del año en la que se come, pocos son los que logran mantener el tipo con actitudes y planteamientos equilibrados.
.Desde aquí, nos parece un buen momento para recomendarles una serie de establecimientos en los que optimizar sus compras, no sólo ahora, sino a lo largo de todo el año. Nos van a permitir que en esta primera entrega nos ciñamos a nuestros establecimientos favoritos en Madrid.
Todos tenemos nuestras tiendas de referencia y direcciones secretas de barrio en las que encontrar nuestros productos o comidas preferidas, por lo que esta relación no pretende ser completa, ni mucho menos, aunque sí asegurarles que todos los establecimientos que en ella aparecen les ofrecen las garantías suficientes de éxito en sus compras.
Como siempre, sus sugerencias serán muy bien recibidas y permitirán ampliar esta lista con sus gustos. Para aquellos que viven fuera de Madrid, algunas de ellas ofrecen venta on-line de sus productos, pero para quienes viven en la Capital, recomendamos fervientemente la visita a los mismos para husmear entre sus alhacenas y mostradores.
Dejando de lado establecimientos que están en la mente de todos como pueden ser, por ejemplo, Mallorca, Embassy, Lavinia o el Club del Gourmet del Corte Inglés y, con Semon lamentablemente cerrado, aquí tienen nuestros preferidos, que les ofrecemos en dos entregas consecutivas, dejando para el próximo viernes el queso, el pan y el vino, con los que completar el camino.
Colmados:
Petra Mora (C/ Ayala, 21). El ultramarinos de toda la vida sigue presente en la compra diaria del madrileño de bien, aunque sea con un concepto y estética modernizados. El establecimiento de Mikel Ceberio constituye un modelo imbatible de marca blanca que oculta a muchos de los mejores productores del país en cada una de sus especialidades: chacinas, carnes, quesos, aceites, conservas, “laterío” vario, especias, mermeladas, helados, chocolates,… todo cuanto puedan necesitar en su cesta cotidiana lo encontrarán en este agradable establecimiento, con un trato a la altura de la oferta.
La Garriga (Paseo de la Castellana, 153 y Serrano, 93): Inclasificables establecimientos en los que comprar y degustar un gran producto difícil de encontrar en Madrid, representado por una buena variedad del mejor embutido catalán: ibéricos, butifarras de todo tipo, longanizas, así como un pan con tomate (que se puede encargar para llevar) que dará sentido a sus vidas. Mientras les preparan el pedido, disfruten de un buen bocadillo de butifarra o jamón como Dios manda para ir creando ambiente.
Cuenllas (C/ Ferraz, 3-5): Desde 1939, tres negocios en uno: restaurante, taberna y tienda, con oferta de similar calidad. En la última, nos encontramos ante una de las grandes bodegas de Madrid, con multitud de referencias, algunas de ellas únicas, además de con una amplia oferta de productos delicatessen: desde ahumados y salazones, a distintas elaboraciones de pato y oca (con especial atención al foie), caviar y otras minucias, pasando por aceites, conservas, pastas italianas de primer nivel…Pasen por la tienda y recupérense del susto en la taberna o en el restaurante, según les haya ido.
Platos preparados
Artigiano de la pasta (Mercado de La Paz, C/Ayala, 28). La familia italiana De Filippo se ha hecho con un puesto de honor en este cada vez mejor surtido mercado. Las mejores pastas, salsa, embutidos y productos gourmet italianos escoltan a la perfección a la verdadera especialidad de la casa: sus platos preparados de pasta fresca, seca o rellena, pendientes del remate final en casa. Desde hace algunas semanas, atienden a mediodía un par de mesas corridas dónde disfrutar de sus platos.
Al Vacio (C/ Colmenares, 13). Antonio García Padró lleva unos cuantos años ayudándonos a llenar la despensa desde su minúscula tienda del barrio de Chueca. El nombre del establecimiento no es casual, ya que la mayoría de los platos preparados, pasteurizados o no, usan este método de conservación. No se pierdan en temporada las pochas con caza, o la escalibada, o su foie artesano. Si esto no les parece suficiente, presten atención a los cursos que ocasionalmente organizan y, si tienen suerte, se encontrarán con algún ilustre ponente.
La Accademia del Gusto (C/ Cristóbla Bordiú 55). El panettone, la burrata o la mortadela trufada son sobradamente conocidos por cualquier aficionado a la gastronomía. Sin embargo, hace diez años eran poco menos que manjares exóticos cuya labor de democratización corresponde a Nicoletta Negrini, dueña y alma máter de esta tienda, inicialmente centrada en el canal mayorista y, desde hace cuatro años, con este establecimiento que sirve como escaparate de sus productos homónimos y de otros fabricantes italianos de calidad. Presten atención a la oferta formativa y a las jornadas de 'aperitivos' a la italiana (a media tarde) donde por el precio de una consumición podrán dar cuenta de un buen número de los productos disponibles en la tienda.
Tokyo Ya (C/ Presidente Carmona, 29) Fueron pioneros en Madrid en el local de la calle Jorge Juan y se dieron a conocer en el actual de la calle Presidente Carmona. Gran surtido de productos como el edamame, el yuzu o la anguila ahumada que, aunque exóticos, es posible encontrar en esta pequeña y diferente 'tienda de barrio' y darán a sus recetas un toque oriental tan de moda últimamente.
Iberochina (C/ Generla Margallo, 23): Traer a estas líneas este local es una forma de poner nombre propio a una de las varias tiendas que en escasos metros pueblan la bulliciosa calle del barrio de Tetuán. La oferta panasiática es inmensa. Les aconsejamos acudir con la lista de la compra bien pensada si no quieren que les echen de casa a su regreso. La relación de buns, de decenas de tipos de salsa de soja, pastas de curry y todo lo que se les ocurra, llega hasta el infinito (y más allá)
Pastelerías:
Oriol Balaguer (C/ Ortega y Gasset, 44): el reputado pastelero catalán, además de ofrecer los mejores bombones de la ciudad, es el autor de la mejor tarta que podamos encontrar: la de “ocho chocolates”, un verdadero tesoro gourmet, sin olvidarnos del resto de su oferta festiva. Madruguen para disfrutar de sus soberbios croissants y, en temporada, su Panettone de Gianduja les marcará un antes y un después frente a la idea que puedan tener de la penúltima invasión italiana.
Chantilly (C/ Claudio Coello, 68) En esta coqueta confitería encontrarán una de las mejores tartas Capuchinas del Foro y el mejor pastel Ruso a este lado del extinto Telón de Acero. Compren merengues para sus abuelitas y dense un respiro en su ajetreada jornada de compras en su salón de té.
Núñez (C/ Diego de León, 35). En este diminuto establecimiento se oculta uno de los secretos mejor guardados de la ciudad: su imbatible Roscón de Reyes que, por suerte, se estira un poco más allá de la Semana de autos. Cubierto sólo con almendras, desata pasiones entre sus fieles seguidores. Las colas para recoger los encargos están más que justificadas.
Moulin Chocolat (C/ Alcalá, 77): Esta pequeña pastelería de corte francés, situada a pocos metros de la Puerta de Alcalá y en frente de El Retiro, dirigida por el Maestro Chocolatero Ricardo Martínez, se ha consolidado como un referente en el uso del chocolate, recurriendo sólo a los de la marca Valrhona. No se pierdan los macarons y los mouchons, considerados por muchos los mejores de Madrid, ni las tradicionales tartas para los más clásicos, sin olvidarnos del roscón de reyes, ya al caer.
La mejor tarta de chocolate del mundo, (“O melhor bolo de chocolate do mundo”) (C/ Alcalá, 89) Estos viejos conocidos lisboetas, quienes presumen (no sin cierta razón) de elaborar la mejor tarta de chocolate del mundo (a base de cacao Valrhona), decidieron no hace mucho cruzar la frontera y establecerse en el insólito local que su despacho de tartas ocupa al fondo del portal, confundiéndose con la mismísima portería. Atraviésenlo con decisión y háganse con un ejemplar. Los suyos se lo agradecerán.
Fuente: elconfidencial.com
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