En esta ocasión además de mostrarles una propuesta gastronómica y sugerirles cómo maridarla mejor, queremos hacer una selección de productos que marquen la diferencia en vuestra mesa para que sorprendan a vuestros invitados y familiares estas Navidades. Les damos algunas propuestas que, sin ser excesivamente caras, harán que descubramos algo diferente de la gastronomía. Cada bebida tiene un plato y un momento idóneo para su consumo, tal y como les comentamos a continuación.
Sidra de hielo
Esta maravilla de origen canadiense, nacida en los años 90 en la provincia de Quebec se hace posible gracias a las bajas temperaturas de la zona que permiten así concentrar los azúcares. Las manzanas se recogen con las primeras heladas, se prensan de inmediato a baja temperatura. Se obtiene así el primer mosto yema o ‘néctar de manzana’ que da lugar a esta delicada y sorprendente bebida.
En España podemos encontrarla en Asturias como Panizales, que desde el 2008 hace este producto, o Valveran con su ‘Sidra 20 manzanas’; así puedes elegir entre las nacionales o las normandas y canadienses, que fueron las pioneras en la obtención de esta sidra mediante procesos naturales.
Esta joya es una buena baza para consumirla como compañera de viaje de un buen besugo al horno con un toque cítrico en su salsa o con postres ligeros a base de frutas poco edulcoradas.
Sauvignon Grape Cooler
Un combinado de vino y ¿por qué no? Oscar Díez Ramos y su colaboradora Lorenza Prieto de la Calle, dos toresanos al frente del proyecto Wine Mixology, que pretende impulsar el consumo de vino a través de la coctelería, nos muestran un cóctel especial para esta ocasión que resulta delicioso, refrescante y adictivo.
Ingredientes:
15 uvas blancas pequeñas (dependiendo del tamaño)
Una cucharada y media de azúcar blanca
Zumo de media lima
Una copa de vino blanco Sauvignon Blanc
Elaboración:
Lo bueno de esta bebida genial es que es muy fácil de preparar. En una copa de vino con cierto volumen ponemos tres uvas, el azúcar y el zumo de lima. Machacamos hasta crear una pasta uniforme. Añadimos a continuación el vino blanco, mezclamos bien todo y después ponemos hielo picado. Por último añadimos a modo de decoración el resto de uvas.
Es pues una bebida válida tanto como cóctel de bienvenida antes de la comida, por su contenido ligeramente ácido que lo hace ideal para abrir boca, o incluso como sustitutivo de cualquier vino espumoso con el que brindar durante estas fechas.
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Fuente: elconfidencial.com
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