1. Azúcar mascabado. Es un azúcar de caña integral, no refinada originario de las Islas Mauricio. Tiene un color marrón oscuro y una gran cantidad de melaza lo que le da un gusto muy particular así como una textura pegajosa. Es una opción mucho más suave y natural que el azúcar negra de supermercado.
2. Azúcar turbinado. Este azúcar hace referencia a uno de los azúcares morenos naturales que se obtiene de la caramelización del jugo de caña de azúcar que posteriormente pasa por una turbina o centrifugadora para eliminar impurezas. Por lo general, puede usarse perfectamente como sustituto del azúcar tradicional en recetas, aunque puede afectar un poco la humedad del producto resultante.
3. Miel. Dos veces más dulce que el azúcar blanco, la miel es un aliado indiscutido de la pastelería. Al igual que el vino, puede presentar una gran variedad de tonos y notas de sabor para emparejar con diferentes ingredientes. Además, al ser más dulce que el azúcar tradicional, puede utilizarse menos cantidad para volver las preparaciones más suaves.
4. Jarabe de arce (o maple). Fabricado a partir de la savia del arce negro, el jarabe de arce puro tiene un dulzor suave en comparación con otros edulcorantes líquidos como la miel o el néctar de agave. Más allá de ser un protagonista en la mesa del desayuno, este jarabe es una superestrella en la despensa de cualquier panadero: funciona perfecto para reemplazar el azúcar en todo tipo de preparaciones dulces.
5. Azúcar de coco. Obtenida de los capullos de las flores de la palmera de coco, este tipo de azúcar se caracteriza por contener gran cantidad de nutrientes y minerales como hierro, zinc, calcio y potasio, así también como antioxidantes. Además, debido a sus propiedades contiene un bajo índice glucémico, por lo cual es ideal para mantener una dieta saludable.
Fuente: Planeta Joy
Vía: MSN.com
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