El Gourmet Urbano: ¿Por qué comemos por ansiedad?

domingo, 7 de junio de 2015

¿Por qué comemos por ansiedad?

Atracones, comida rápida y desordenada, desequilibrio alimenticio; estas pueden ser algunas de las pistas que nos indican un mayor problema: tenemos ansiedad y estrés, y comer es la manera más rápida que se nos ocurre para enfrentarlo.


Muchas personas creen que hay que comer cuando se tiene hambre, pero esto puede confundirse precisamente por la propia ansiedad. Subir de peso es una de las primeras señales de que algo no estamos haciendo bien y esto, al mismo tiempo, nos puede estar acarreando un desequilibrio alimenticio que nos puede llevar a problemas mayores de salud.


El trabajo en exceso y la sobrecarga de actividad a lo largo del día, produce un mayor gasto de energía, por lo que deberíamos ajustar ese mayor consumo con el aporte necesario. Para hacerlo y no caer en una mala alimentación o en exceso de grasas y azúcares, hay que saber cómo.

Noemí Ojeda es nutricionista y al mismo tiempo amante de la comida. Con su ejemplo, como crítica gastronómica, podríamos concluir que no es necesario privarnos de nada, ni dejar de disfrutar del placer del comer, para llevar una buena alimentación, siempre y cuando controlemos lo que comemos, cuánto y en qué momento lo hacemos.

Cuando estamos nerviosos, o tenemos alguna situación de estrés, relacionamos la comida con la calma, como si nos tranquilizase, ¿Por qué ocurre esto? ¿Es algo más psicológico que físico?

Cuando tenemos un ritmo acelerado, aumenta nuestra ansiedad y volcamos nuestro estrés con la comida por un proceso hormonal. Al ingerir alimentos, aumentan nuestros niveles de serotonina, hormona que nos relaja y reconforta. Asímismo, los bajos niveles de oxitocina en estos procesos ansiosos, hormona relacionada con la felicidad y el placer, establecen un mecanismo de búsqueda de alimentos dulces para mitigar esta sensación.

Hay personas que dejan de comer, y otras que engullen en un momento de estrés fuera de lo habitual, ¿A qué se debe?


Generalmente en momentos de estrés se activan los mecanismos fisiológicos anteriores, dándose el caso también de relacionar ciertos alimentos con el bienestar. No suele producirse inapetencia en este momento, sino en momentos tristes o de depresión. Normalmente cuando tenemos ansiedad comemos alimentos con grasas o hidratos, ¿Por qué? Este tipo de alimentos, llamados de mayor densidad calórica, nos satisfacen más por ser mas palatables, es decir, por tener más características organolépticas que premien nuestros sentidos.

Hay gente que confiesa estar obsesionada con la comida, querer comer a todas horas, y no poderlo evitar ¿Qué les pasa realmente?


En la mayoría de estos casos, el problema viene por estados ansiosos y conductas compulsivas. En casos de obesidad mórbida, lo que se produce es una inhibición de los mecanismos de saciedad, por lo tanto, una mayor sensibilidad al apetito. Pero esto no es frecuente, lo más común es que sea un impulso que es capaz de reducirse con una buena reeducación alimentaria.

Para controlarlo, ¿Qué podemos hacer? Hay trucos, o ejercicios?


Pues lo mejor es aplicar un tratamiento cognitivo mediante una terapia de reeducación alimentaria, donde se adquiera conciencia de la necesidad de alimentarnos correctamente y no comer compulsivamente. Lo mejor es ponerse en manos de dietistas-nutricionistas para que nos orienten.

Como nutricionista, ¿Te han puesto alguna vez esta excusa, la de la ansiedad?


La ansiedad por la comida o la compulsividad no las considero excusas, son realmente situaciones reales, que se producen en uno o varios momentos de nuestra vida y que no sabemos gestionar. He visto y sigo viendo muchos casos en los que los pacientes hacen alusión a esta sensación y en la mayoría, en los casos en los que el paciente es capaz de adherirse bien al tratamiento dietético, se consigue que se establezca una conciencia sobre los buenos hábitos y se abandonen los anteriores.

Pueden leer a Noemí Ojeda en: http://elvinoalsolyyoalasombra.blogspot.com.es/

Laura Molina

Fuente: gastronomia.com

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