Conferencia Mundial sobre Enoturismo

La Organización Mundial de Turismo (OMT) celebrará la primera Conferencia Mundial sobre Enoturismo en la región georgiana de de Kakheti del 7 al 9 de septiembre.

Como sucede con la gastronomía, el vino se ha convertido en una parte esencial de la experiencia del viajero que desea conocer la cultura y el estilo de vida de cualquier destino y en un motivo creciente para viajar. El encuentro organizado por la OMT tiene como objetivo fomentar el desarrollo de este segmento con la exposición de experiencias y buenas prácticas vinculadas al enoturismo. Entre ellas, el proyecto que encabezan las bodegas españolas Osborne, González Byass, Barbadillo, Freixenet y Pagos del Rey, integradas en el Foro de Grandes Marcas de España.

"Es un ejercicio extraordinario porque vemos que bodegas competidoras se unen para hacer un producto más competitivo con la excusa del vino pero que realmente sirve para posicionar un destino nacional con una oferta de valor en la que las bodegas actúan como centros de representación del territorio y de sus recursos culturales, patrimoniales e históricos. Creo que eso es lo que demanda un consumidor nuevo, mucho más exigente, cuando busca un producto turístico diferente", explica Yolanda Perdomo, Directora del Programa de Miembros Afiliados de la OMT.

Kakheti, cuna del vino

La elección de Kakheti como punto de encuentro para esta primera conferencia mundial no es casual. Esta región situada en el este del país, en el límite con Rusia y Azerbaiyán, es una de las zonas productoras de vino con más tradición del mundo. Los arqueólogos la consideran la cuna del vino. El antiguo método de vinificación en "kvevris" - envases de arcilla ovoide que se usa para hacer fermentar el mosto y almacenar y añejar el vino -ha sido inscrito en 2013 como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO. El procedimiento de vinificación consiste en prensar la uva y meter el mosto con el orujo, el escobajo y las pepitas en estos recipientes, que se sellan y entierran para que la mezcla fermente durante cinco o seis meses antes de ser consumida. La calidad de los vinos y brandies elaborados con variedades únicas es reconocida en todo el mundo. Los asistentes a la Conferencia

Fuente: Gastronomía.com