Un vino natural suaviza la intensidad de la resaca.
No quieres ser esa amiga que no toma vino porque le da dolor de cabeza, pero tampoco quieres ser la que se pierde la clase en el gimnasio del día siguiente por culpa de la resaca. Por suerte, existe varias formas de disfrutar el vino, sin las consecuencias.
Muchos piensan que los sulfitos son los culpables de los dolores de cabeza causados por el vino, pero no todos los sulfitos son iguales. Los sulfitos están en todas partes, se producen de forma natural en la piel de la uva y estarán en el vino como en la mayoría de los alimentos que consumimos.
Los sulfitos naturales no son el problema.
Los sulfitos se suelen agregar durante el proceso de elaboración del vino como un tipo de conservante para estabilizar el vino, retardar la oxidación y detener la formación de bacterias y levaduras no deseadas. Con moderación, eso no es algo que evitar para saltarse la resaca. El problema es cuando los enólogos comienzan a rociarla en todas partes, en cada paso del proceso de elaboración del vino.
Es por eso que buscar un vino libre de sulfitos, o un vino natural, puede suavizar la intensidad de la resaca del día siguiente, estos son hechos por enólogos que no abusan de los sulfitos durante la preparación del vino.
Si bebes una botella de vino, la sentirás al día siguiente, pero la gravedad será diferente.
Y ahora que estamos en búsqueda de culpables, los sulfitos no son los únicos, otros componentes pueden ser los responsables de una resaca matadora.
Estudios sugieren que una intoxicación en la sangre puede causar dolores de cabeza, debido a la forma en que el vino afecta la presión arterial. Especialmente el tinto puede contener histaminas, que algunas personas no pueden metabolizar.
¿CÓMO ELIMINARLA?
Como no hay manera de controlar lo que tu cuerpo metaboliza y lo que no, puedes concentrarte en combatir la principal causa de resaca: la deshidratación.
El alcohol es diurético, hacer cosas como comer alimentos, tu cuerpo puede pedir comida chatarra, chocolates y cualquier otra cosa, complácelo. Beber más agua durante la noche y al día siguiente ayudará a evitar una resaca más que tu selección de vinos.
Otra forma de decirle adiós es tomar bebidas y alimentos frescos ricos en fructosa, favorecen la eliminación del alcohol de forma más rápida y además restituye las vitaminas perdidas por el exceso de alcohol. El zumo de tomate es un importante desintoxicante y el zumo de naranja el gran reconstituyente de la Vitamina C y energía.
Por otro lado, las infusiones son buenos aliados, la manzanilla nos ayudará con las molestias estomacales y otras como sauce, menta y ginseng, aliviarán el dolor de cabeza. Si la situación es extrema y se tienen náuseas, lo mejor es el jenjibre.
La clave
El mejor de los consejos es mantenerse hidratado antes y después, esto disminuirá o evitará el dolor de cabeza.
¿Sabías que...?
Los sulfitos naturales no son los responsables del malestar, como siempre se ha creído.
Fuente: El Siglo de Durango
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