El retato del fotógrafo Marcos Zimmermann, impreso sobre la espuma de café Fuente: LA NACION - Crédito: Hernán Zenteno
Eso ocurrió en el stand de Zurich en BAphoto, donde se ofrece gratis este "arte efímero".
En el stand de Zurich, una máquina de café imprime retratos con tinta comestible. Fuente: LA NACION - Crédito: Hernán Zenteno
Con una tinta comestible, una máquina "imprime" un retrato sobre la espuma del café, de manera que es posible contemplar el propio rostro y consumirlo. El colmo de Narciso.
Celina Chatruc
Fuente: La Nación
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