Una de las recomendaciones es emplear abundante aceite de oliva y que esté bien caliente
Nadie se puede resistir –sobre todo en una fría tarde de invierno– a una deliciosa taza de chocolate con churros. Si tú también quieres sorprender a tus invitados en casa con unos ricos churros, no te pierdas estos trucos para que la receta te quede perfecta.
Abundante aceite y bien caliente
Antes de nada, revisa que tienes todos los ingredientes necesarios:
- Agua
- Harina
- Sal
- Mantequilla
- Para freír, aceite de oliva suave o de girasol
- Azúcar para el toque final
En un primer momento, lo que tenemos que hacer es calentar agua con sal en una cazuela y le añadimos también una nuez de mantequilla. Cuando llegue a ebullición es el momento perfecto para echar la harina. Mezcla todos los ingredientes y obtendrás una masa que no se debe pegar a las paredes del recipiente donde se encuentre.
A continuación, introduce esa masa en una manga pastelera con una boquilla que nos dé la característica forma de churro –no es necesario tener una churrera como los profesionales– y vete haciendo tantos como desees y de la medida que consideres.
Para que los churros queden de 10 es esencial freírlos en abundante aceite y que esté bien caliente. No escatimes, ya que los churros deben "nadar" en la freidora. Dales la vuelta para que se hagan por ambos lados y sácalos cuando estén dorados. Listo, tendrás unos churros crujientes por fuera y suaves por dentro.
Colócalos en una fuente con un papel para quitarles el exceso de aceite y, si lo deseas, puedes espolvorearlos con azúcar o acompañarlos de una rica taza de chocolate caliente. En un momento, puedes darte un pequeño capricho –no todos los días– para el desayuno o la merienda.
VICTORIA HERRERO
Fuente: 65 y más
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