Cerveza Matadragón.Heraldo
Lograr un sabor dulce, suave y ahumado en una cerveza de 14 grados de alcohol ha convertido a la Matadragón en una bebida experimental única, que ha conquistado el circuito europeo de premios con una decena de medallas.
La pequeña fábrica aragonesa Ordio está detrás de la fórmula secreta de esta ‘barley wine’ artesanal que acaba de ser nombrada como la mejor cerveza española en el Concurso Internacional de Lyon 2020, su décimo galardón internacional.
“Es única, no hay una cerveza parecida”, ha reconocido el director de ventas de Ordio, Eduardo García.
La Matadragón ha sumado su décimo premio, superando a grandes marcas nacionales como Mahou, en un prestigioso certamen que cada año recibe más de 7.000 botellas de cervezas, vinos y espirituosos de 40 países del mundo.
El secreto del éxito de esta cerveza radica en los orígenes artesanales de Ordio, que ha mantenido sus sistemas de fermentación isobárica, que le proporciona su nivel de espuma y su característico sabor dulzón.
“Somos artesanos, no tenemos grandes máquinas. Contamos con métodos más rudimentarios que una fábrica industrial”, ha señalado García.
El galardón de Lyon sirve como colofón a un proyecto que nació en 2012 en Blesa, un pequeño municipio turolense de apenas 124 habitantes, de la mano de dos apasionados a la cerveza artesanal extranjera.
“Es un juego que se te acaba yendo de las manos”, ha subrayado García.
Ocho años después la fábrica se ha profesionalizado, reubicándose en un edificio del municipio zaragozano de La Puebla de Alfindén y abriendo un bar en el centro de la capital aragonesa donde ofrecen seis estilos distintos de cerveza artesana propia.
El premio ha llegado en plena crisis, lo que ha obligado a esta pequeña empresa aragonesa a reinventarse con la puesta en marcha de la “Ordioneta”, un vehículo con el que han repartido cervezas a domicilio para paliar las pérdidas.
“Hemos salvado bastante bien la papeleta con la "Ordioneta" porque hemos tenido bastantes pedidos”, ha confesado el director de ventas de la empresa, que apuesta por seguir reforzando la venta online.
La fábrica aragonesa también ha notado el efecto de la cancelación de las ferias artesanales de cerveza, que se habían convertido en el mejor escaparate para vender y dar a conocer su marca por todo el territorio español.
La Matadragón es una cerveza que puede encontrarse por un precio que oscila entre los 2 y los 3 euros en tiendas especializadas, algunos supermercados y varios bares zaragozanos que han apostado por introducir en sus cartas las cervezas artesanales.
Sin embargo, la fábrica sigue peleando para hacerse un hueco en un sector dominado por las grandes marcas nacionales que tienen más capacidad para “ajustar sus precios” con los hosteleros que las pequeñas empresas.
Para García, el éxito de la línea de bebidas de Ordio está unido al crecimiento de la cultura cervecera en España, donde cada vez hay más personas que reclaman solo cervezas artesanales.
“Se ha producido un aumento entre clientes que buscan algo diferente”, ha explicado.
El director de ventas reconoce incluso que esta realidad ha provocado un cambio en el mercado, donde las grandes fábricas han comenzado a introducir versiones de gamas doble malta o Indian Pale Ale (IPA) en sus catálogos.
CARLOS VILLAR ORTIGA
Fuente: Heraldo.es
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