La enóloga de Mar de Frades, Paula Fandiño, nos ayuda a desmitificar algunas falsas creencias en relación al mundo del vino.
"El riberita es para la carne y los blancos para las mujeres". Si has oído esto alguna vez, has sido víctima de los tópicos que envuelven al mundo del vino.
Edición especial de Mar de Frades 2019 diseñada por THE 2ND SKIN CO.© MAR DE FRADES.
No lo decimos nosotros, nos lo cuenta Paula Fandiño, enóloga de la exquisita firma Mar de Frades. Esta semana, nos presentan una edición especial de su vino estrella, Mar de Frades Atlántico 2019.
Vestido de lujo, con una etiqueta creada por los diseñadores Antonio Burillo y Juan Carlos Fernández, de la casa de modas THE 2ND SKIN CO, nos encontramos con un vino "con una maduración y un brillo excelentes".
"Tuvimos un verano súper soleado en Galicia que nos dio un origen fenomenal. La maduración fue en julio y agosto, y la vendimia, se hizo en septiembre. Tomamos buenas decisiones. Como siempre, la poda, la recolección y vendimia han sido manuales. Las uvas se llevan a la bodega en cajas pequeñas de 15 kilos para que no se dañen. Como resultado, nos hemos encontrado con una añada con un perfil intenso, tropical y aromático. Pero también nos topamos con ciertas similitudes con vinos de años anteriores, como el punto salino, aromático y vibrante que identifica a Mar de Frades".
Con una copa en la mano de esta excelente cosecha y la magnífica botella de diseño presente, hablamos con Fandiño de las falsas creencias que confunden en muchas ocasiones a los amantes de los buenos caldos. Mitos anticuados o inexactitudes que nos limitan a disfrutar libremente de nuestros vinos favoritos (y que pueden emborronar nuestra fachada de expertos gourmets en cualquier reunión que se precie):
No, eso es incierto. Los aromas de los vinos blancos son más sutiles y chispeantes, no son tan pesados y armados como la de los vinos tintos, que contienen taninos y otros elementos que dan más consistencia en boca. Hace un tiempo eran las mujeres las que preferían este tipo de elegancia y de sutileza en los vinos. Eso es lo que provocó que, hace unas décadas, se pensase que eran cosa de mujeres. Pero a día de hoy, es una afirmación desfasada. El vino blanco puede estar asociado a maridajes y a gastronomía como la comida asiática, el pescado o unos sabores especiales. Tenemos que desmitificar esto ya. Hay hombres que adoran el vino blanco y mujeres que prefieren el tinto. Existen todo tipo de consumidores.
Cada vino lo debemos tomar a una temperatura adecuada de consumo donde se potencien sus aromas. Cuando hablamos de un vino blanco como el de Mar de Frades, los aromas de melocotón, albaricoque y piña se potencian cuando el vino está fresco. Entre 8 y 10 grados. Con vinos espumosos, como nuestro Brut Nature o vinos elaborados por el método tradicional, también de otras regiones como champán o cava, aún debe tomarse más frío. Si tiene crianza, se recomienda beber menos fresco, en torno a los 10 y 12 grados.
"Tuvimos un verano súper soleado en Galicia que nos dio un origen fenomenal. La maduración fue en julio y agosto, y la vendimia, se hizo en septiembre. Tomamos buenas decisiones. Como siempre, la poda, la recolección y vendimia han sido manuales. Las uvas se llevan a la bodega en cajas pequeñas de 15 kilos para que no se dañen. Como resultado, nos hemos encontrado con una añada con un perfil intenso, tropical y aromático. Pero también nos topamos con ciertas similitudes con vinos de años anteriores, como el punto salino, aromático y vibrante que identifica a Mar de Frades".
Con una copa en la mano de esta excelente cosecha y la magnífica botella de diseño presente, hablamos con Fandiño de las falsas creencias que confunden en muchas ocasiones a los amantes de los buenos caldos. Mitos anticuados o inexactitudes que nos limitan a disfrutar libremente de nuestros vinos favoritos (y que pueden emborronar nuestra fachada de expertos gourmets en cualquier reunión que se precie):
"El vino blanco está asociado a mujeres"
No, eso es incierto. Los aromas de los vinos blancos son más sutiles y chispeantes, no son tan pesados y armados como la de los vinos tintos, que contienen taninos y otros elementos que dan más consistencia en boca. Hace un tiempo eran las mujeres las que preferían este tipo de elegancia y de sutileza en los vinos. Eso es lo que provocó que, hace unas décadas, se pensase que eran cosa de mujeres. Pero a día de hoy, es una afirmación desfasada. El vino blanco puede estar asociado a maridajes y a gastronomía como la comida asiática, el pescado o unos sabores especiales. Tenemos que desmitificar esto ya. Hay hombres que adoran el vino blanco y mujeres que prefieren el tinto. Existen todo tipo de consumidores.
"El vino blanco se debe tomar muy frío"
Cada vino lo debemos tomar a una temperatura adecuada de consumo donde se potencien sus aromas. Cuando hablamos de un vino blanco como el de Mar de Frades, los aromas de melocotón, albaricoque y piña se potencian cuando el vino está fresco. Entre 8 y 10 grados. Con vinos espumosos, como nuestro Brut Nature o vinos elaborados por el método tradicional, también de otras regiones como champán o cava, aún debe tomarse más frío. Si tiene crianza, se recomienda beber menos fresco, en torno a los 10 y 12 grados.
"Perfecto con un hielito"
Se puede llegar a aguar el vino pero hay determinados momentos de consumo donde se permite. Confluyen diversas situaciones donde hace mucho calor, el vino no se consigue enfriar lo suficiente y entonces se le añade un cubito de hielo. ¿Por qué no? Eso sí, el hielo debe ser duro, ser consistente, estar muy frío y servirse muy poquito vino para que no se agüe y pierda su sabor.
Difiero absolutamente. La elegancia de un vino, su complejidad y sus matices son muy amplios. En blancos tenemos matices balsámicos de hinojo, anís, menta, hierba luisa, de menta piperita, matices de frutas (la línea de lichi, la piña, frutas más ácidas como la manzana, la pera), las notas florales (jazmín o rosa), aromas de bosque… Tenemos una amplísima gama de aromas que cuando un vino está cuidado y se ha elaborado con esmero aparecen en la maduración. Si se saben extraer, exprimir y potenciar podemos conseguir muchos más aromas que un tinto. Al igual que los tintos cuando están bien hechos tienen una amplia paleta de aromas y sabores.
Opino todo lo contrario. Un gran vino, ya sea blanco, tinto o espumoso, siempre envejecerá bien. La mujer bella se mantiene y el que tiene, retiene. Si el vino es bueno, el envejecimiento solo va a aportar experiencia, madurez, mayor contundencia y complejidad al vino. El que esté acostumbrado a tomar vinos pedirá vinos más complejos que les supongan más retos palatinos.
No es que sea menos saludable. El tinto tiene taninos que son elementos antioxidantes que pueden ser beneficiosos para salud. Por otro lado, los vinos blancos suelen tener menos alcohol que los tintos. En esa balanza, muchos médicos y expertos han defendido los tintos como antioxidantes pero no valoraban su grado alcohólico.
Esto se dice porque maridan perfectamente sus aromas en boca con los pescados (al horno, a la parrilla), los arroces… Pero las carnes blancas como el pollo, el pavo o la codorniz también maridan perfectamente con los vinos blancos.
Son los más populares. No quiere decir que sean los mejores. Los mejores vinos blancos están en cualquier tipo de elaboración y de uva que nos encontremos.
"Tienen menos diversidad de aromas que un tinto"
Difiero absolutamente. La elegancia de un vino, su complejidad y sus matices son muy amplios. En blancos tenemos matices balsámicos de hinojo, anís, menta, hierba luisa, de menta piperita, matices de frutas (la línea de lichi, la piña, frutas más ácidas como la manzana, la pera), las notas florales (jazmín o rosa), aromas de bosque… Tenemos una amplísima gama de aromas que cuando un vino está cuidado y se ha elaborado con esmero aparecen en la maduración. Si se saben extraer, exprimir y potenciar podemos conseguir muchos más aromas que un tinto. Al igual que los tintos cuando están bien hechos tienen una amplia paleta de aromas y sabores.
"No envejecen bien. Los mejores son los jóvenes"
Opino todo lo contrario. Un gran vino, ya sea blanco, tinto o espumoso, siempre envejecerá bien. La mujer bella se mantiene y el que tiene, retiene. Si el vino es bueno, el envejecimiento solo va a aportar experiencia, madurez, mayor contundencia y complejidad al vino. El que esté acostumbrado a tomar vinos pedirá vinos más complejos que les supongan más retos palatinos.
"Es menos saludable que el vino tinto"
No es que sea menos saludable. El tinto tiene taninos que son elementos antioxidantes que pueden ser beneficiosos para salud. Por otro lado, los vinos blancos suelen tener menos alcohol que los tintos. En esa balanza, muchos médicos y expertos han defendido los tintos como antioxidantes pero no valoraban su grado alcohólico.
"El vino blanco solo marida bien con los pescados y arroces"
Esto se dice porque maridan perfectamente sus aromas en boca con los pescados (al horno, a la parrilla), los arroces… Pero las carnes blancas como el pollo, el pavo o la codorniz también maridan perfectamente con los vinos blancos.
"Albariño o verdejo son los mejores"
Son los más populares. No quiere decir que sean los mejores. Los mejores vinos blancos están en cualquier tipo de elaboración y de uva que nos encontremos.
ANA ARJONA
Fuente: Vanity Fair
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