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| Los efectos estimulantes de la cafeína pueden comenzar entre los 15 y 30 minutos luego de la ingestión. FOTO: SAMER DABOUL / PEXELS |
Tomar el café recién te levantas no sería el mejor momento para aprovechar su efecto estimulante
Cuando recién te levantas no sería la mejor opción para aprovechar el estímulo de tu bebida, ya que cuando despiertas, el cortisol y la adrenalina comienzan a bombear para ayudarte a animarte por completo. Estas dos hormonas son mucho más potentes que el café, según explica a Well+Good el psicólogo clínico Michael J. Breus, conocido como “El doctor del sueño”.
¿Cuál es la mejor hora para tomar la primera taza de café?
Para obtener efectos óptimos, Breus recomienda esperar al menos 90 minutos después de despertarte para tomar tu primera taza de café.
La cafeína no afecta a todos de la misma manera
El cuerpo absorbe el 99% de la cafeína dentro de los 45 minutos de consumirla. Los efectos estimulantes pueden comenzar entre los 15 y 30 minutos luego de la ingestión duran unas 4 horas en promedio, según explica la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA).
Se acumula químico del sueño
La cafeína en un inicio te quita el sueño porque bloquea la adenosina (un químico que te provoca ganas de dormir) y los receptores de tu cerebro.
Dado que la cafeína no afecta la producción de este químico, solo bloquea. Cuando el efecto de la cafeína pasa, gracias a que se acumula la adenosina, puedes sentir cansancio o somnolencia.
Por qué no tomar café por la tarde o noche
El café afecta tu sueño. Puedes quedarte dormido, pero esto no significa que tu sueño sea reparador. “Es posible que puedas quedarte dormido, pero la calidad del sueño que estás obteniendo será pura mie… Peor será tu sueño de ondas lentas”, dice Breus.
Cuánto café es suficiente durante el día
Una ingesta segura de café para los adultos sanos es de 3 a 5 tazas al día (el equivalente a 400 mg de cafeína), según sugieren las pautas dietéticas de Estados Unidos. Una taza de 8 onzas de café preparado contiene aproximadamente 95 mg de cafeína.
Si comienzas a agregar tazas y tazas de café, en lugar de un efecto positivo puedes obtener lo contrario. El consumo no moderado puede provocar efectos negativos como ansiedad, inquietud, insomnio y aumento de la frecuencia cardíaca.
En el embarazo, la ingesta se cafeína se limita a no más de 200 mg al día.
El café no solo tiene efectos en el cerebro a corto plazo
Los polifenoles que se encuentran naturalmente en el café con cafeína y descafeinado pueden actuar como antioxidantes para reducir el daño oxidativo y la inflamación de las células.
A largo plazo, el consumo moderado de café favorece la memoria, protege del deterioro cognitivo y se ha relacionado con un menor riesgo de padecer Alzheimer y Parkinson.
El café protege el cerebro de distintas formas, a través de la cafeína, sus polifenoles (que incluyen ácido clorogénico y ácido quínico), y la tregonelina.
Alba Hernández
Fuente: El Diario NY
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