#CAFE #COCKTAILS ☕ 🍸 | Café y cócteles, una combinación celestial que necesita sus trucos

Irish Cofee CLV

Te proponemos cuatro cócteles con café clásicos y modernos, y todos los consejos para que te salgan bien

La combinación entre alcohol y café es atómica: puede ser un bombazo de sabor, o convertirse en un brebaje imbebible. Estos dos estimulantes parecen haber nacido para tomarse juntos, y de hecho, algunos licores clásicos, como el Tía María, el Kahlúa, o el propio Licor Café gallego los integran con probado éxito desde hace años, y según el consultor gastronómico Xavier Iglesias, gran conocedor del mundo del café, “el espresso martini es ahora mismo uno de los tres cócteles más demandados en todo el mundo”.

Pese a ello, este tipo de cócteles no siempre están a la altura de las expectativas, porque el café es un ingrediente que hay que saber tratar. Cuenta José Luis Samitier, profesor de la escuela de hostelería de Guayente, barman y propietario del gastrobar Bombardino de Benasque (que tiene como cóctel estrella este combinado après ski, en versión cafetera) que en uno de los primeros concursos de coctelería en los que participó descubrió amargamente esta fragilidad. “Había comprado un café de Colombia magnífico, lo preparé con todo el mimo, lo embotellé y lo guardé en frío hasta la hora del concurso… y salió mal, porque perdió todos los aromas y se oxidó. Desde entonces utilizó café cold brew, es decir, macerado en frío, que es mucho más estable”.

Este tipo de cócteles no siempre están a la altura de las expectativas, porque el café es un ingrediente que hay que saber tratar

Como Samitier, también Iglesias cree que esta es la mejor opción, incluso para la coctelería casera: “Funciona muy bien si queremos preparar varios cócteles, y para mezclarlo con tónica, como alternativa al gintónic, porque si mezclamos un espresso caliente con el refresco nos va a producir una reacción química que hará que brote mucha espuma, pero que en cambio los amargos de la tónica y el café no casen. Pero esta combinación gusta mucho, porque según envejecemos encontramos los amargos más interesantes, y es un modo de consumir una copa de tarde en la que podemos controlar exactamente la cantidad de cafeína y evitar el alcohol”.

El cold brew, además, puede tunearse, sustituyendo el agua de la maceración por zumos, como hacen en el bar El jardí de Can Marc, de Begur, donde toman como líquido el zumo de manzana para una maceración que será la base de su Cafetini, un cóctel que sirven en una cafeterita italiana de toda la vida. “Es nuestra opción para los cafeteros”, comentan desde el establecimiento, “porque no servimos café como tal”.

Sin embargo, en los cócteles donde el café sí que se utiliza caliente -como por ejemplo el clásico Irish Coffee- interesa que éste llegue con algo de dilución para que no resulte agresivo, puesto que el alcohol caliente ya resulta, por sí mismo, algo agresivo. “Un error muy común”, comenta Samitier, “es, si utilizamos una máquina de bar, o una de cápsulas, alargar el café haciéndolo largo, con lo que sólo conseguimos llevar al base sus aromas menos nobles. Más vale prepararlo corto y rebajarlo con el agua que consideremos necesaria”. Iglesias, por su parte, se inclina por utilizar máquinas como la aeropress, un aparato muy sencillo que consiste en dos tubos de plástico encajados en los que se pueden macerar a presión café -u otras infusiones o especias- en líquidos calientes. Este tipo de cafetera, que para muchos baristas es la favorita para el hogar, ofrece según Iglesias, “la posibilidad de controlar en casa al detalle la temperatura, el molido, y la dilución. ¡Y encima es sencillísima!”.

El cold brew, además, puede tunearse, sustituyendo el agua de la maceración por zumos

Y con todo esto, ¿qué hacer? Pues os proponemos cuatro cócteles clásicos para disfrutar, aunque hay algunos más, como el White Russian que tanto gustaba al Gran Lebowski, el ya mencionado cafetónic, el cremat, o el propio carajillo. ¡Seguro que alguno os despierta el interés por los combinados de café!

Espresso Martini CLV

Espresso Martini

Ingredientes:

• 5 cl de vodka
• 3 cl de kahlúa
• 1 cl de jarabe de azúcar 1:1

Elaboración:

Un clássico del bartender británico Dick Bradsell, este cóctel es un poco la excepción a todo lo dicho anteriormente porque su receta especifica un espresso, aunque admite variaciones. Agitar todos los ingredientes en una coctelera con cubitos. Servir en una copa tipo martini enfriada

Irish Cofee CLV

Café irlandés

Ingredientes:

• 5 cl de whiskey irlandés
• 1-2 cucharaditas de azúcar moreno
• 12 cl de café caliente
• 5 cl de nata semimontada

Elaboración:

Creado en los años cuarenta como reconstituyente para los pasajeros que llegaban de los vuelos internacionales al aeropuerto de Limerick, el café irlandés canónico no tiene varias capas, sino que el whiskey y el café están integrados. La nata, según dice José Luis Samitier, “debe estar semimontada y fría, para crear un contraste agradable al beberlo directamente”.

Verter el café caliente en un vaso previamente atemperado, y disolver en él el azúcar y el whiskey. Coronar con la nata semimontada, ayudándonos del lomo de una cuchara para que no se mezcle con el café.

Bombardino CLV

Bombardino

Ingredientes:

• 4 cl de licor de huevo (Advocaat)
• 2 cl de ron infusionado con naranja
• 2 cl de licor cacao macerado con especias
• 1 café espresso
• Nata semimontada

Elaboración:

Disponer el licor de huevo en el fondo de un vaso atemperado. Mezclar el café con el ron y el licor cacao, y disponerlo encima, con cuidado. Por último, acabar de llenar el vaso como hicimos con el café irlandés y decorar con canela y cacao.

Mar Calpena

Fuente: La Vanguardia