Descongelar el pollo correctamente es clave para evitar posibles enfermedades causadas por bacterias patógenas. En Pollo Olympico nos preocupamos por ti y la salud de tu familia, por eso te contamos como hacerlo de forma fácil y segura.
Durante la descongelación, los alimentos deben mantenerse a temperaturas adecuadas, ya que cualquier bacteria que pudiera estar presente antes de congelar puede empezar a multiplicarse. Existen tres maneras de descongelar el pollo correctamente: En la nevera, en el microondas o con agua fría.
Decongelar en la nevera:
Descongelar en la nevera conlleva planeación pues es el método más demorado. Cuando se coloca el pollo congelado en la nevera, debe verificarse la temperatura del interior, que debe ser de unos 4ºC. Si la cifra es menor, el pollo tardará más tiempo en descongelarse. Es recomendable utilizar un plato para evitar que goteen los jugos sobre otros alimentos.
Descongelar en el microondas:
La descongelación en el microondas es una de las opciones más rápidas. Se debe seleccionar la opción de descongelado en el microondas, introducir el pollo en un plato y asegurarse que haya suficiente espacio entre este y el interior del electrodoméstico, para que el aire caliente circule sin problemas (esto para evitar que lo bordes queden cocidos y el centro del pollo congelado).
Descongelar con agua fría:
Para utilizar este método, el pollo debe estar envuelto o envasados de forma hermética para evitar que el tejido absorba agua y se reduzca su calidad, así como para prevenir la contaminación por bacterias presentes en el agua. El pollo se sumerge bien cerrado en agua fría y esta se cambia cada cierto tiempo (unos 30 minutos) para que continúe con la descongelación.
Recuerda: No deben descongelarse los alimentos a temperatura ambiente o en agua caliente. El riesgo de contaminación es mucho mayor (el crecimiento de bacterias se produce sobre todo entre 4ºC y 60ºC).
Los alimentos, una vez descongelados, no deben volver a congelarse salvo que se cocinen a más de 70ºC durante al menos dos minutos.
Fuente: Pollo Olympico
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