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| El restaurante Can Travi Nou te pone una calçotada en la mesa. (Instagram/@cantravinou) |
- Llega la temporada de los calçots y con ella las grandes y deliciosas calçotadas que tu paladar no va a querer perderse este año
- Platos típicos de Cataluña
Una vez cultivados, se asan con llama viva de sarmientos y cuando están bien hechos se envuelven en papel de periódico hasta su consumo. Cuando se sirven, se hace en una teja junto a una salsera que es la que contiene la ‘Salvichada’, la salsa de calçots, que también es conocida como salsa romesco. Son toda una institución y rostros conocidos, como Úrsula Corberó, no dudan en presumir en sus redes sociales de esta tradición gastronómica catalana siempre que pueden.
Además, para dar comienzo a la temporada de calçots, todos los años desde 1982, se celebra en el último domingo de enero La Gran Fiesta de la Calçotada. Es uno de los eventos más esperados en Cataluña, concretamente en las plazas del municipio de Valls en Tarragona. Es una fiesta histórica y una de las celebraciones gastronómicas más populares de Cataluña. Visitantes de todo el país y del mundo se acercan para degustar los tradicionales calçots y para pasar un día inolvidable.
A partir de las 10 de la mañana las calles de Valls se llenan con el aroma del humo, de la cebolla, la salsa y la carne a la parrilla. Durante toda la mañana, se celebran diversos actos como el Concurso de Comer Calçots, que este año ha celebrado su edición número 37, el Concurso de Cultivadores de Calçots o el Concurso de Salsa de la Calçotada de Valls, con demostraciones varias de cómo se hace la salsa típica.
Además de los calçots y de la salsa, también son muy importantes sus complementos, como las carnes -cordero, longaniza, panceta y morcilla-, y las guarniciones de alcachofas a la brasa, patatas, alubias salteadas con ajo y perejil y por supuesto, alioli.
Sin embargo, si este año no has podido acercarte a Valls a degustar los diferentes calçots, no te preocupes, hay restaurantes muy buenos en Barcelona que ofrecen menús de calçotada a muy buen precio, que están deliciosos y que no vas a querer perderte durante la temporada de esta deliciosa cebolla.
Mussol Glòries
Por 34 euros este restaurante ofrece un menú calçotada que está disponible en comidas y cenas todos los días. El original se encuentra en la calle Caspe, aunque gracias a su popularidad, han ido abriendo más locales en toda la ciudad, acercando la experiencia a más personas.
Los Mussols llevan sirviendo comidas espectaculares desde los años 90, generando espacios que evocan y trasladan al centro de Barcelona el encanto y la gastronomía de las masías de Cataluña, con sus productos y recetas más tradicionales, como, por supuesto, los calçots.
Can Travi Nou
Can Travi Nou es una auténtica masía catalana situada muy cerca del centro de la ciudad, es un espacio reconocido por su aspecto encantador y por ser un referente gastronómico en Barcelona. Tienen más de 30 años de experiencia, ofreciendo a todos los amantes de la cocina de mercado un rincón rústico y acogedor en donde pasar un rato especial.
Con el comienzo de la temporada de calçots, inauguran su menú de calçots por un precio de 43 euros. Es un menú muy completo, con mucha cantidad y calidad, que merece la pena probar si te encuentras en Barcelona y quieres conocer lo que es comer unos buenos calçots.
Bodega Joan
La bodega lleva desde 1942 funcionando, cuando inició su actividad como venta a granel de vinos catalanes. Sin embargo, durante la primera década de su historia se transformó y se convirtió en una casa de comidas que ofrece una magnífica carta de recetas tradicionales con platos de temporadas, entre ellos una buena calçotada que preparan desde hace 80 años.
El ambiente es amable y cercano, sentirás que estás como en casa mientras disfrutas de una tradición catalana que es increíble y deliciosa. Los calçots se preparan en una auténtica brasa, como tiene que ser, y con una salsa que es receta especial de la casa que no podrás encontrar en ningún otro lugar. El menú, que incluye los calçots, una parrillada de carne acompañada de alcachofas a la brasa o patatas, postre, café y bebida, tiene un precio de 30 euros.
No te quedes sin probar este maravilloso manjar en tu próxima escapada en Barcelona y participa en una de las tradiciones gastronómicas más deliciosas.
Lucía Molina
Fuente: Vanitatis - El Confidencial
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