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| Imagen de archivo de un plato de croquetas / PAVLO DUDNYK |
Los amantes de la buena gastronomía tienen una cita ineludible hoy jueves 16 de enero: el Día Mundial de la Croqueta. Esta fecha se ha convertido en un hito en el calendario culinario, y no es para menos. La croqueta, un plato que ha conquistado paladares en todo el mundo, es un símbolo de la creatividad y la tradición de la cocina española. Pero, ¿realmente conocemos todo sobre esta deliciosa receta?
¿Quiénes son los mayores consumidores de croquetas en España? ¿Y cuál es la mejor croqueta del país?
Aunque la croqueta tiene su origen en Francia, donde fue mencionada por primera vez en el recetario ‘Le cuisinier royal et bourgeois’ de François Massialot en 1691, es en España donde esta receta ha alcanzado su máxima expresión. La palabra ‘croquet’ se utilizó para describir una forma ingeniosa de aprovechar los alimentos sobrantes, un concepto que hoy en día se alinea con la cocina sostenible. Con el tiempo, la receta ha evolucionado, y en el siglo XIX, el chef Antonin Carême introdujo la bechamel como ingrediente esencial, dando lugar a las croquetas que conocemos hoy.
En la actualidad, España se ha convertido en un verdadero paraíso para los amantes de las croquetas, con un consumo que supera los 3.700 millones de unidades al año, lo que equivale a una media de 2,5 kilos por persona. A lo largo de los años, la croqueta ha ido adaptándose a las modas culinarias: desde rebozados finos hasta panko grueso, y desde tamaños pequeños para un bocado hasta versiones más grandes para disfrutar en dos. Las variaciones son infinitas, con recetas que van desde las más clásicas hasta combinaciones sorprendentes que incluyen ingredientes dulces y salados.
Un aspecto fundamental que ha perdurado a lo largo del tiempo es el uso de productos de primera calidad en su elaboración. Ingredientes como leche, aceite de oliva virgen extra y harina son esenciales, y en el caso de la croqueta clásica de jamón ibérico, se utilizan huesos de jamón y el propio jamón como protagonistas, asegurando un sabor y una textura inigualables.
El año pasado, el Restaurante Quinqué, dirigido por el chef Carlos Griffo, se alzó con el título de campeón del Concurso Internacional a la Mejor Croqueta de Jamón Ibérico, organizado por Madrid Fusión & Sánchez Romero Carvajal. Este evento, que batió récords de participación, destacó la croqueta de Quinqué entre más de 70 recetas presentadas. El jurado, presidido por el renombrado chef Pedro Subijana, valoró su rebozado fino y su bechamel cremosa, que integraba perfectamente el jamón en su textura.
Este año, el próximo lunes 27 de enero, se celebrará la XI edición del Concurso, donde los finalistas tendrán la oportunidad de demostrar que su receta es la mejor. Entre ellos se encuentran chefs de renombre como Axel Smith de Restaurante Simpar en Santiago de Compostela, Alejandro Villa de Restaurante La Pandora en Avilés, y Edu Espejo de Restaurante Flama en Valencia, entre otros. El jurado estará compuesto por figuras destacadas de la gastronomía, como Gastón Acurio y Jorge Vallejo, quienes evaluarán las creaciones de los participantes.
Las croquetas españolas podrían considerarse el ejemplo perfecto de lo que llamamos "comida reconfortante". Son esos bocados que no solo deleitan el paladar, sino que también abrazan el alma, evocando memorias felices con su textura cremosa, su aroma inconfundible y su sabor casero.
Sabores más demandados de croquetas en 2024
1.- Jamón ibérico (65%)
2.- Setas (12%)
3.- Pescado (10%)
4.- Carne (6%)
5.- Queso (3%)
6.- Marisco (1,6%)
7.- Verduras (1,4%)
8.- Otras variedades (1%)
Como de costumbre, las croquetas de jamón ibérico siguen siendo las croquetas más demandadas en bares, restaurantes o compras online / hipermercados. En concreto, el 65% del consumo fue de esta variedad en España.
En segundo lugar, tenemos a las croquetas de setas (12%). Las de boletus son las principales en este segmento.
Cabe destacar que las croquetas de pescado (10%) han subido, siendo el bacalao, el pescado más utilizado en ellas.
Entre el resto de sabores que entran dentro de las que más gustan entre los croqueteros, podemos incluir a las de carne (pollo, cocido, carne, etc) queso o marisco (gambas, chipirones, etc).
Consumo de croquetas por edades en España
1.- Mayores de 55 años (41,4%)
Los guardianes de la tradición, quieren croquetas caseras con ingredientes tradicionales, jamón ibérico preferentemente.
También son partidarios de croquetas suaves como las de pescado (bacalao o pollo).
2.- De 36 a 55 años (31,3%)
Los adultos son los nostálgicos del sabor casero ya que buscan la calidad y el sabor auténtico que evoque recuerdos familiares (como las que hacía tu madre o abuela).
Su preferencia, croquetas clásicas de jamón ibérico, cocido o bacalao.
3.- De 18 a 35 años (20,5%)
La generación millennial y la Generación Z también se declaran fans de las croquetas, pero con un enfoque más gourmet.
Este grupo se siente atraído por las versiones más innovadoras, como las de boletus, queso azul o variedades veganas. También son fans de las de jamón ibérico.
4.- Menos de 17 años (6,8%)
Su textura cremosa, fácil de masticar, y su sabor suave hacen que sean una de las opciones favoritas en los menús infantiles, tanto en casa como en restaurantes.
Croquetas de jamón ibérico y las de pollo son las más populares en esta franja.
Las croquetas de jamón ibérico han sido de nuevo las croquetas que más pide la gente en bares, restaurantes o que compra para consumo en casa. Supusieron casi 65% del consumo en España.
Un apunte importante es que las croquetas 100% vegetales (sin ingredientes de origen animal) también están aumentando su consumo de año a año. De hecho, el 43% de los consumidores, compra alimentos veganos al menos una vez por semana cosa que en 2018 solo era el 10%, por ejemplo.
Trucos para freír croquetas sin que se rompan
Guarda bien estos trucos para freír croquetas porque te harán falta de cara al futuro si eres de los que cocinan este delicioso manjar:
Cuando hay que freír unas croquetas en una sartén o freidora, es imprescindible además de echar abundante aceite, que esté muy caliente (entre 180-190ºC). La temperatura es muy importante.
No metas muchas croquetas a la vez para freír, deben tener espacio entre sí y no estar apelotonadas. Recuerda que si metes las croquetas directamente congeladas, y muchas a la vez, baja la temperatura del aceite.
Receta tradicional de croquetas
Ingredientes:
- 200 g de pechuga de pollo o jamón cocido (o una combinación de ambos)
- 1 litro de leche
- 100 g de mantequilla
- 100 g de harina
- Sal al gusto
- Pimienta al gusto
- Nuez moscada al gusto (opcional)
- Aceite para freír
- 2 huevos batidos
- Pan rallado (al gusto)
Instrucciones:
Cocinar el relleno:
Si utilizas pechuga de pollo, cocínala previamente (puedes hervirla o hacerla a la plancha). Luego, pícalo finamente. Si usas jamón cocido, córtalo en trozos pequeños.
Preparar la bechamel:
En una sartén grande, derrite la mantequilla a fuego medio.
Añade la harina y cocina durante 1-2 minutos, removiendo constantemente, hasta que se forme una especie de pasta (roux).
Agregar la leche:
Poco a poco, agrega la leche caliente a la mezcla de harina y mantequilla, sin dejar de remover para evitar que se formen grumos. Lo ideal es que la leche esté tibia o caliente para que se integre mejor.
Cocina la mezcla durante unos 10 minutos, removiendo constantemente, hasta que espese y se convierta en una bechamel suave.
Incorporar el relleno:
Añade el pollo o jamón picado a la bechamel y mezcla bien.
Salpica con un poco de sal, pimienta y nuez moscada al gusto para sazonar.
Enfriar la masa:
Deja que la mezcla se enfríe a temperatura ambiente durante unos 15 minutos.
Luego, cubre la masa con film transparente, asegurándote de que toque la superficie de la masa para evitar que se forme una costra. Refrigérala durante al menos 2 horas (mejor si la dejas toda la noche).
Formar las croquetas:
Con la masa fría, toma pequeñas porciones y forma bolas o cilindros, dependiendo de la forma que prefieras para las croquetas.
Rebozar las croquetas:
Pasa las croquetas por el huevo batido, asegurándote de que queden bien cubiertas.
Luego, rebózalas en pan rallado, presionando ligeramente para que el pan se adhiera bien.
Freír las croquetas:
En una sartén, calienta abundante aceite (preferiblemente de girasol) a fuego medio-alto.
Fría las croquetas por tandas, no más de 4 o 5 a la vez, para que no se enfríe el aceite.
Cocina hasta que estén doradas y crujientes por fuera, alrededor de 2-3 minutos por cada lado.
Escurrir:
Una vez fritas, saca las croquetas con una espumadera y colócalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
Servir:
Sirve las croquetas calientes y disfruta de su delicioso sabor y textura crujiente por fuera y suave por dentro.
Fuente: Diario de León
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