Yelitza Acosta (@yelicocinera): Especial de San Valentín: ¿SABES A QUÉ SABE EL AMOR?

¿Alguna vez te preguntaste a qué sabe el amor? Metafóricamente le hemos puesto color, ¿recuerdas la canción “el amor es azul”?, así mismo, quizás muchos les han puesto sabor, dulce, amargo, picante y quizás otros dirán que es desabrido, lo asociamos a las emociones que ese amor nos ha hecho sentir.
 
Lo intangible del amor le podemos poner color, sabor, olor y transportarnos en un sinfín de sensaciones sensoriales asociadas a las memorias que tenemos de diferentes experiencias, transformadas en ilusiones de esos momentos mágicos que nos hace sentir el amor propiamente dicho.
 
Podría decir entonces que para mí el amor sabe a chocolate, porque al igual que el amor produce una sensación de felicidad, motivado a que estimula la producción de endorfinas, o porque contiene un estimulante llamado feniletilamina que produce sensaciones igual al enamoramiento, o simplemente por su sabor agradable que activa el sentido del olfato y el gusto esencial para disfrutar de los placeres del amor.
 
O quizás puedo decir que el amor sabe a manzana, todos sabemos que Eva tuvo bastante éxito con ella, puede que tú también.


Y si te digo que el amor sabe a cambur, porque te repone las energías rápidamente, para que intentes de nuevo cualquier acción que te inspire el amor; además, de su fragancia es dulce y sensual.

 
Será que el amor sabe a miel, por ello que se acostumbraba regalar jarras de miel a los recién casados, para que los primeros contactos amorosos fueran todo un éxito, de allí viene lo de La Luna de Miel.
 
Aunque escucho por allí que el amor sabe a fresa, fruta sensual, tan solo su color da energía, su equilibrio perfecto entre lo ácido y lo dulce que estimula al gusto y evoca al deseo; además de estimular el sistema circulatorio, ya que energetiza y alimenta el flujo sanguíneo alimentando también la capacidad sexual y el deseo carnal.
 
Pero les confieso que realmente el amor a mí me sabe a champagne burbujeante, heladita, que cuando la tienes en boca su acidez inmediatamente te endulza el paladar y es allí en ese momento preciso que añoras un beso y suspiras por él y el deseo invade tus sentidos…. Eso es amor.
 
Puedo seguir escribiendo acerca de que el amor sabe a coco, mandarina, a sal, menta, a pie de limón y quizás la lista sea tan larga que no logre terminarla. Lo importante aquí es que la cocina y sus productos están relacionados con todas las experiencias cotidianas o no, un aroma, un sabor siempre nos transporta a nuestras memorias más escondidas y despierta recuerdos y muchos de esos recuerdos son relacionados con el amor y el desamor, y es allí donde lo identificamos y asociamos con los sabores y sin sabores de emociones vividas.
 
Mucho se ha escrito sobre el amor y la comida, y tenemos un decir de que el amor entra por el estómago, pero más allá de satisfacer un estómago hambriento, es satisfacer y alimentar los sentidos. Desde el mismo momento de seleccionar los productos que se utilizaran para hacer una comida que sea una entrega, la preparación, un ritual impecable, servirla una evocación a lo sublime y compartirla un acto de amor.
 
Te daré hoy dos recetas, ya que estamos en víspera del Día de San Valentín. Garantizadas, cada vez que las preparo son éxito seguro.

 

ENSALADA DE PÉTALOS DE ROSA

 

 
Ingredientes:

• 4 tazas de Mix de lechugas.
• 2 tazas de pétalos de rosas orgánicas de diferentes colores.
• ¼ taza de almendras fileteadas.
• 1 taza de aderezo de rosas.

 
Preparación:
En un bol colocar el mix de lechugas bien limpias y secas, los pétalos de rosas igualmente limpios y secos, agregar el aderezo de rosa, mezclar y esparcir las almendras fileteadas por encima. Servir y disfrutar.
 
Aderezo de Rosa:

 
Ingredientes:

• 2 und yogurt firme natural.
• 1 taza de pétalos de rosas rojas.
• 5 cucharadas de miel.
• Una pizca de sal.
• Preparación:
• Licuar todos los ingredientes.

 

FRESAS SENSUALES

 

 
Ingredientes:

• 1 docena de fresas.
• Champagne.
• Chocolate 70 %

 
Preparación:
 
Limpia bien las fresas y con una puntilla quitar con mucho cuidado la piel que la recubre para eliminar las semillitas, no elimines las hojitas que la coronan. Luego, con una inyectadora, inyectarle champagne a cada una, reservarlas en la nevera.
 
Derrite el chocolate y tempéralo, luego introduce la mitad de la fresa en el chocolate una a una y colócalas de nuevo en la nevera para que estén bien frías al momento de consumirlas.
 
La sensación en boca al morder la fresa es una real sorpresa, así que no se lo digas.
 
Bien amigos y amigas, me despido, pero no sin antes preguntarles: para ti, ¿A QUÉ SABE EL AMOR?
 
Yelitza Acosta
Cocinera

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