Seducido por las posibilidades de uno de los ingredientes más representativos de nuestras tierras, el chef venezolano expondrá en Italia la realidad del cacao criollo venezolano, en el marco de un evento que apuesta por la alianza entre cocineros y productores. A su regreso, celebrará en Alto un menú que lo incluirá como elemento protagonista de la entrada al postre
Invitado por Slow Food al “Encuentro de Cocineros de la Alianza”, a realizarse del 2 al 3 de abril en Toscana, el chef venezolano Carlos García expondrá su experiencia en el restaurante Alto, en donde progresivamente ha venido concretando la intención de incorporar productos locales dentro de un discurso que enraíce la alta cocina con su entorno.
En la cruzada que lanza en favor de la biodiversidad; en su misión por reafirmar el compromiso cada vez más imperante entre cocineros y productores por preservar identidad y territorio, la organización italiana suma a García, quien aprovechará el evento para reflexionar en torno a la importancia de defender estandartes como el cacao venezolano –incluido en parte de sus platos- entre otros productos bandera que merecen y esperan ser reivindicados.
Frente a 170 de los mejores cocineros de Italia, hablará sobre la despensa local y las circunstancias particulares que condicionan el oficio de quienes se paran frente al fogón en una ciudad tan particular como Caracas.
Mientras se exponen los productos del Baluarte de Slow Food, García compartirá estrado con el prestigioso chef Massimo Bottura, comandante de Osteria Francescana, restaurante de 3 estrellas Michelin en Módena. El intercambio entre ambos subrayará la necesidad de custodiar, en Suramérica, tradiciones, materias primas y territorios; destacará la responsabilidad que corresponde a los cocineros en la defensa de ingredientes “buenos, limpios y justos”.
En la noche del 3 de abril, García participará en una cena especial en la que servirá el postre “Tierra de cacao”, como muestra de lo que promueve en su más reciente menú.
Luego de que Massimo Bottura y Carlos García se conocieran en Caracas a finales de octubre, la “contaminación” entre ambos no ha hecho más que retroalimentarse. El interés de García por incorporar ingredientes y sabores propios se profundiza, mientras Bottura ve con mayor claridad que el futuro de la gastronomía está en América Latina -tal y como lo advierten muchos de sus pares.
El embajador de Slow Food y chef de Osteria Francescana insiste en acercarse con sus sentidos abiertos a este curioso universo de posibilidades buscando descubrir nuevas expresiones y talentos, extendiendo una invitación a los chefs de este continente a mantener vivas sus tradiciones para hacerlas evolucionar; a profundizar y a ahondar en sus territorios, pero sobre todo, a pensar.
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