Esta situación se acentúa en un plato como la Entrada de guacamole y champiñones del Viejo que invita a una degustación individual de las texturas y conjunción de sabores que incluye la cebolla, el vinagre y el picante, además de los propios champiñones.
Por eso y para asegurar que bocado a bocado el paladar se limpiara de la untuosidad del plato, decidimos armonizarlo con el Vilarnau Brut un cava moderno, fresco pero de sabor intenso y con agradables notas de pan tostado y algo de mantequilla.
¿Burbujas y guacamoles? Sin duda alguna una combinación para celebrar
¡Buen apetito y salud!
Fernando Franz
Chef
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