Una investigación de la Universidad Politécnica de Madrid y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha demostrado la biocompatibilidad que algunos residuos que genera esta bebida durante su elaboración presentan con elementos químicos, tales como el fósforo, el sílice, el calcio o el magnesio, que componen los huesos, lo que se traduce en la capacidad de regeneración del tejido óseo.
El consumo moderado de cerveza disminuye el riesgo de padecer dolencias cardíacas como el infarto, y el silicio, componente antes mencionado, además de sus propiedades regenerativas previene la aparición de enfermedades neurodegenerativas como el alzhéimer, según explica Jesús Román Martínez, profesor de la Facultad de Medicina de la Universidad Complutense de Madrid y presidente del Comité Científico de la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación.
Otro estudio del CSIC revela que la ingesta controlada mejora el sistema inmunológico, especialmente en mujeres; de acuerdo con una investigación de la Universidad de Granada, la cerveza sirve, de forma muy efectiva, para la recuperación muscular después de la práctica deportiva.
Es tradicional, como se ha visto, el consumo de esta bebida en la festividad de San Patricio, y aquí hemos dejado claros algunos de los beneficios de ingerir de forma controlada y prudente la cerveza.
Fuente: Dicen - Diario Independiente
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