La medida de cuarentena que se ha adoptado en la mayoría de países del mundo, por cuenta del nuevo coronavirus, han obligado a muchos emprendimientos y establecimientos comerciales a reinventarse, en especial, aquellos en los cuales su actividad productiva se caracterizaba por el contacto físico o cercano con sus clientes.
Buddy y Barley entregan un domicilio a una familia de Long Island.
Foto: AFP
Tal es el caso de Six Harbors Brewing Company, una pequeña cervecería ubicada en Long Island, EE.UU. Pues a pesar de que su negocio podía abrir por ser considerado esencial, fue necesaria una estrategia para cumplir con las normas de distanciamiento social estipuladas por el estado de Nueva York.
Ante este panorama Mark y Karen Heuwetter, propietarios de la cervecería, entrenaron a sus perros Buddy y Barley para que les ayudaran con los domicilios durante el aislamiento.
"En un principio pensamos ¿podemos abrir? ¿podemos cerrar? ¿qué hacemos?... tuvimos que redefinir nuestro negocio" contó Mark a 'CBS News'.
Fue así como encontraron en sus mascotas dos grandes aliados. Cuando hay un pedido, Buddy y Barley llevan en sus cuellos un paquete de cuatro latas de cerveza para encontrarse con los clientes y realizar las entregas.
De esta forma, los consumidores de la bebida entran en contacto con los perros, juegan, los acarician y Mark y Karen, conservando la distancia, pueden entregar el domicilio con total confianza.
Así pues, esta iniciativa no solo es una estrategia para cumplir con las normas de distanciamiento sino que también, ha servido como una forma creativa de llamar la atención de otros compradores que quieren entrar en contacto con los caninos.
De tal forma que "Buddy y Barley son superestrellas en la ciudad de Huntington" como lo aseguran los Heuwetter.
Esta es una experiencia interesante tanto para las familias que reciben el pedido como para los perros, para los cuales, de acuerdo con los Heuwetter, el entregar los domicilios es como dar un paseo.
Buddy y Barley están atentos a cualquier domicilio, ellos merodean la cervecería mientras los Heuwetter producen y empacan las bebidas.
Foto: AFP
Pero más allá de poder mantener funcionando la cervecería a esta familia le agrada mucho la sensación de repartir sonrisas y alegría gracias a sus mascotas, en especial, teniendo en cuenta la sensación generalizada de desánimo que ronda al país por cuenta del coronavirus.
"Cuando salen y hacen sonreír a la gente, creo que a la gente realmente le gusta eso. De hecho, la gente necesita eso en estos días, así que cuando ponen una sonrisa en la cara de las personas están haciendo su trabajo, lo cual, por naturaleza, es fácil para ellos" resaltó Karen.
Aún así, las ventas no han sido tan buenas como antes del confinamiento, pero los Heuwetter mantienen la esperanza de que con los domicilios, por lo pronto, podrán suplir algunas cuentas. Fe que seguirá firme gracias a sus aliados de cuatro patas, más conocidos en Long Island, como 'los perros cerveceros'.
"Estamos haciendo todo lo posible para salir adelante... con suerte, con las nuevas opciones, podremos pagar las facturas e intentarlo" concluyó Mark.
Fuente: El Tiempo
No hay comentarios. :
Publicar un comentario