Envolver la comida con plástico, aluminio o en un recipiente reutilizable que se pueda lavar, evita que se contamine durante el transporte.(Tony Cenicola/The New York Times)
Cocinar, hornear y compartir lo que se prepara es una de las pocas maneras en que podemos conectarnos de manera tangible en este momento. ¿Pero de verdad es seguro?
“La respuesta en general es ‘sí’”, indicó Elizabeth A. Bihn, profesora del Departamento de Ciencia Alimentaria en la Universidad Cornell.
El riesgo de transmitir o contraer el coronavirus por el acto de compartir comida o por el mismo empaque de los alimentos es muy bajo, pero aun así hay que tomar precauciones. Y el virus no debería ser la única preocupación.
“Lo último que queremos en esta era del COVID-19”, comentó, “es contraer una enfermedad transmitida por alimentos y tener que ir a la sala de Emergencias, lo cual nos puede poner en mayor riesgo de contraer el virus”.
A continuación, presentamos algunos consejos para preparar, entregar y recibir alimentos que reducirán el riesgo de transmitir o contraer el virus o una enfermedad a través de los alimentos.
“Lo último que queremos en esta era del COVID-19”, comentó, “es contraer una enfermedad transmitida por alimentos y tener que ir a la sala de Emergencias, lo cual nos puede poner en mayor riesgo de contraer el virus”.
A continuación, presentamos algunos consejos para preparar, entregar y recibir alimentos que reducirán el riesgo de transmitir o contraer el virus o una enfermedad a través de los alimentos.
Acatar los lineamientos de seguridad alimentaria y toma en cuenta las alergias
Seguir las cuatro prácticas principales de la Asociación para la Educación en Seguridad Alimentaria: limpiar, separar, cocinar, enfriar. Conocerlas y, en general, suele seguirlas, pero ahora debe acatarlas al pie de la letra. Asegúrese de lavarse las manos y las superficies que use con cuidado y de tener presente la contaminación cruzada. Cocinar los alimentos a las temperaturas adecuadas y refrigerarlos de inmediato.
No tiene nada de malo (de hecho, es un detalle lindísimo) llevarle comida a una mujer embarazada o a una madre lactante o a un individuo inmunocomprometido. Solo hay que seguir los lineamientos mencionados con más cuidado.
No tiene que usar un cubrebocas o una careta mientras prepara los alimentos, pero si esto evita que se toques la cara o se tranquiliza, adelante. Lo mismo aplica para los guantes.
Desde el principio pregunta si la persona tiene alergias. Este no es un buen momento para tener una reacción alérgica. Asimismo, y esto debería quedar implícito, no lleve (ni prepare) alimentos que ciertos grupos de personas no deban comer. Por ejemplo, nada de quesos de leche cruda para las mujeres embarazadas y nada de miel para los niños menores de 1 año. Si duda sobre usar algo, pregunte antes de entregarlo.
No use jabón (ni lejía) para limpiar los vegetales y las frutas. El jabón y la lejía pueden ser muy dañinos para la salud. Más bien, enjuáguelos con bastante agua fría de la llave.
Organizar una entrega o recolección sin contacto
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, se piensa que el coronavirus se propaga principalmente a través de las gotas que se producen cuando una persona enferma tose o estornuda. Así que el mayor riesgo ocurre cuando se hace una entrega en persona. Cuando entregue el platillo, ponerse una careta o cubrebocas y coloque la comida en un lugar neutral, a unos dos metros o más de distancia, después deje que su amigo o ser querido lo recoja.
Empaquetar y desempaquetar con cautela
Envuelva el alimento en plástico o aluminio, o guárdelo en un recipiente reusable que se pueda lavar. Esto evita que la comida se contamine en el trayecto.
Si le preocupa recibir alimentos de parte de alguien más, piense en cómo lo va a abrir y manejar.
Lo que Bihn sugiere es lo siguiente: llevar la comida al interior de su casa y hacer espacio en la encimera de la cocina para poner los recipientes.
(Si están en una bolsa, coloca la bolsa en el suelo y saca los contenedores). Ábrelos en el espacio designado y pasa los alimentos a un tazón, un plato o uno de tus propios recipientes. Tira la bolsa a la basura y lava los contenedores con agua caliente y jabonosa si son reusables. (Si no lo son, deséchalos). Limpia la encimera. Lávate las manos. Come.
Bihn admite que no todos tomaremos estas medidas cada vez que recibamos algo, pero si te preocupa, este proceso podría tranquilizarte.
Intente no estresarse
Respire hondo y recuerde que las probabilidades de contraer o transmitir el coronavirus por alimentos o sus empaques son muy pocas. Así que hornee esa tanda de galletas o hervir esa olla de sopa y llévarsela a alguien que aprecia. A ambos les hará bien. Es importante que no olvide lavarse las manos cuando llegue a casa.
Tony Cenicola/The New York Times
Fuente: El Universo
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