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El consumo excesivo de café puede afectar el volumen cerebral.
El cabe puede beneficiar tu cuerpo de distintas maneras si se consume con moderación y sin carga de azúcar. Es una bebida que tiene efectos en el cerebro, inmediatos y a largo plazo. Sus fectos pueden ser positivos o negativos dependiendo de tu manera de consumirlo.
El café puede aumentar el estado de alerta, la energía y la capacidad de concentración. La Fuente Nutrición de Harvard comparte que la cafeína puede afectar los estados mentales, como reducir la ansiedad y mejorar el estado de ánimo.
El café no solo aporta cafeína, también es rico en polifenoles que pueden actuar como antioxidantes para reducir el daño oxidativo y la inflamación de las células. Consumirlo en cantidades moderadas por largo tiempo se ha asociado con beneficios en la memoria y un menor riesgo de padecer Alzheimer y Parkinson.
1. Beber en exceso
El consumo de café en exceso puede afectar el volumen cerebral y puede aumentar el riesgo de demencia.
Mientras el consumo moderado de café puede resultar beneficioso, consumir demasiado se ha asociado con volúmenes cerebrales totales más pequeños y un mayor riesgo de demencia como lo muestra un reciente estudio realizado por investigadores de la Universidad de Australia del Sur.
El estudio evaluó los efectos del café en el cerebro entre 17, 702 participantes del Biobanco del Reino Unido (de 37 a 73 años), y encontró que aquellos que bebían más de seis tazas de café al día tenían un 53 por ciento más de riesgo de demencia.
En el consumo moderado se consideran hasta 400 mg de cafeína, aproximadamente 4 tazas de café de 8 onzas. Cada taza tiene en promedio 96 mg de cafeína.
2. Cargarlo de azúcar
En todo el cuerpo, el exceso de azúcar es dañino. El alto consumo de azúcar favorece la inflamación lo cual afecta tu cerebro. La inflamación está asociada a la depresión y a la enfermedad de Alzheimer.
Los niveles altos de glucosa en sangre también pueden afectar la conectividad funcional del cerebro, que vincula las regiones del cerebro que comparten propiedades funcionales y la materia cerebral comparte la Facultad de Medicina de Harvard.
La glucosa elevada puede resultar en una función cognitiva más lenta, déficits en la memoria y la atención.
3. Beberlo demasiado tarde
Aunque no todas las personas tienen la misma sensibilidad a la cafeína. Procura evitar beberlo muy tarde si no deseas afectar la calidad de tu sueño. Dormir mal no es favorable para la salud del cerebro. No dormir bien puede provocar problemas de aprendizaje, concentración y reacción.
Los efectos estimulantes de la cafeína pueden comenzar entre los 15 y 30 minutos luego de la ingestión y duran unas horas (el promedio es de 4 horas), depende de varios factores, como la edad y el peso, señala el Grupo Científico de Productos Dietéticos, Nutrición y Alergias de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA).
Fuente: noticiero.lat
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