#LACTEOS 🧈 | Nata líquida: cómo hacerla, trucos y recetas

La nata líquida es un ingrediente básico en muchas recetas.

Preparar nata para cocinar casera es mucho más sencillo de lo que imaginas y tan solo necesitas dos ingredientes y 20 minutos

La nata líquida es un multiusos en la cocina, sobre todo para la elaboración de salsas. Pero, ¿necesitas nata líquida y no tienes comprada? Si en tu frigorífico tienes leche y mantequilla, ¡no tienes por qué preocuparte! En tan solo 20 minutos podrás disponer de una nata líquida casera, hecha por ti sin complicaciones y con un resultado mucho más natural de lo que puedas comprar en el supermercado.

Eso sí, los ingredientes para preparar la nata líquida tienen unos condicionantes. Por un lado, la mantequilla debe ser no vegetal y contener al menos, un 75 % de materia grasa. Por otro lado, la leche deberá ser entera.

Ingredientes de la nata líquida

• Mantequilla no vegetal
• Leche ser entera

Si cuentas con estos dos ingredientes podrás preparar sin grandes complicaciones tu propia nata líquida.

Cómo preparar nata líquida

1. Tan solo es necesario poner a calentar la misma cantidad de leche y de mantequilla a fuego bajo, o en el microondas si lo prefieres
2. Mezclar ambos productos integrándolos bien
3. Dejarlo enfriar durante 15 minutos en el congelador. ¡Listo!

Ingrediente básico en las salsas, la nata aporta cremosidad a otras recetas como purés, risottos o pudines

Sin embargo, si te falta la mantequilla o tienes prisa por tener la nata, hay una solución: utilizar aceite, que deberá ser de girasol. En este caso, habrá que esperar a que se derrita la nata.

RECETAS CON NATA LÍQUIDA

Receta de torrijas

Tarta de queso de La Viña


Tarta de chocolate

Receta de chocolate a la taza casero

¿En qué recetas emplear la nata líquida?

Tal y como hemos indicado al principio, la nata líquida es un ingrediente básico en la elaboración de salsas jugosas como la popular carbonara, aunque también se pueden usar en otras salsas de queso, de setas, de almendras, etc.

Asimismo, y con la misma intención de añadir un plus de cremosidad, la nata líquida suele emplearse en pudines, risottos, en cremas y purés, o en una de las recetas estrellas de la gastronomía portuguesa: bacalao con nata.

Sin embargo, el uso de la nata va más allá y puede servirnos para añadir una jugosidad extra a elaboraciones como pasteles salados, tipo hojaldres o quiches, de los que te dejamos unas ideas: hojaldre de salmón, gambas y puerros, y pastel de calabacín, bacon y quesos. ¡Riquísimos!

Fuente: Diario Vasco